viernes, 8 de julio de 2011

VECINOS DE ENFRENTE... EL FINAL.

VECINOS DE ENFRENTE …(EL FINAL) .
Miraba sin mirar a través del grueso cristal….el día era radiante, el sol se reflejaba en el jardín florido, cuidado….meticulosamente diseñado por expertos.
Hacía horas que estaba despierta, pero no había bajado aún…él estaba en su trabajo, en su cueva, su mundo, sus finanzas….su imperio….no vendría hasta la noche, después de su juego de tenis, la cena con amigos en el club….y quién sabe qué más.
Los chicos, jóvenes  y sumamente independientes, cada uno en sus estudios, amigos, proyectos…tardarían en darse cuenta de su ausencia…. Si es que lo hacían, los había criado con tanto desapego, estaba siempre tan obsesionada por seguir los pasos de su marido, por atraerlo, por intentar una y mil veces que su vida se cruce con la de él…. recogiendo migajas…. Prendiéndose de ilusiones…. Atesorando la intensa vida sexual que llevaban en un principio cuando fueran poco más que el “vecino de enfrente” que se casó con la chica enamorada y de buenos recursos económicos.
Permitió que se casara con ella por interés….en su padre, en los ascensos que conseguiría, en un camino que resultó fácil porque era emprendedor…ella en cambio tenía una sola meta….que él la ame….después de casi veinticinco años…¿lo había logrado?...¿le servía la manera en que él la amaba?...Estaba agotada…impecable por fuera….seguía siendo una mujer muy atractiva…producto de la buena genética y de interminables cuidados y tratamientos de belleza.
Su padre murió bendiciendo a su yerno…. eran tal para cual, su madre sólo se alteraba si una uña osaba despintarse antes de algún evento…. Y sus amigas hacía años que tenían una vida de  verdad.
Estaba sola, se sentía sola…estaba enamorada… o bien su obsesión por él se había hecho carne de tal manera que ya no discernía si era amor o capricho de mantenerlo a su lado.
Quien fuera su mejor amigo y después su cuñado, formó familia, no hizo grandes progresos como el mayor, pero vivían bien, era el tío adorado de sus hijos y mantenía una buena relación con ellos… pero no congeniaba con su hermano…ni con lo que le hacía a ella.
Cuando descubrió las primeras infidelidades…lejos de alejarse de él, reprocharle o negarse a estar juntos en una cama… más se empecinó, gastaba fortunas en lencería, reservaba habitaciones en encantadoras hosterías alejadas, promiscuas, escondidas….pasaba horas haciendo el amor como si no viniera de tocar a otra, de dedicarle tiempo, miradas, caricias…. Porque estaba segura de que como amante no le haría faltar absolutamente nada….a ninguna.
El no se negaba, estaba la mirada del suegro siempre atenta, por otro lado el sexo con su esposa siempre era bueno….el hecho de disfrutar de otras nada tenía que ver con ella…era simplemente tomar todo lo que podía, en el aspecto que fuere, nada se dejaba de lado si valía la pena….por suerte…sabía repartirse en millones de pedazos….y era eficiente en todos….pero la mejor parte eran sus hijos.
Ellos eran su mayor orgullo, jóvenes, sanos, deportistas, hermosos, educados…¿felices?... si, claro… no podían desear más de lo que la vida les había dado…muy generosamente.
Ella suspiró, el zumbido de la bordeadora la retrotrajo a un año atrás… cuando en su lista de mandados se hallaba comprar una nueva para el jardinero, distraída al estacionar, empujó al auto que estaba atrás suyo, se bajó junto con el otro conductor y unos ojos risueños…con el alma reflejada … le hicieron un guiño.
_No pienso decirte nada con respecto a tu condición femenina al volante_ extendió su mano y se presentó.
_Perdón….aunque no lo creas no suelo hacerme lugar a los empujones…_ se presentó ella también.
_Se quien sos…_ le dijo  apoyándose en la puerta de su coche_ Coincidimos en una reunión hace unos meses atrás… amigos en común…
_Vuelvo a pedir perdón entonces_ mientras contestaba constataba que no hubiese ningún daño en los vehículos…. Se disponía  a saludar y alejarse cuando él la invitó a tomar un café.
Cuando se negó,  el conductor, con un cómico tono de súplica la hizo cambiar de opinión… después de todo no eran desconocidos, eran amigos de amigos… todo muy facebook.
Sin darse cuenta charlaron dos horas seguidas….nunca jamás nadie la había escuchado con tanta atención….y sobre todo con ese nivel de interés, haciendo comentarios acertados y contagiándola de un buen humor que hacía años no sentía.
Con reticencia se despidieron….él le pasó su celular “por si alguna vez necesitaba asesoramiento en marketing”… ella lo agendò y le dio el suyo…”por educación”.
En el mes siguiente se encontraron de “casualidad” tres veces y a ambos les costaba frenar la conversación, la risa espontánea…ella se nutría de la atención que le brindaban esos ojos tiernos, dorados… él simplemente no podía dejar de mirarla.
Se acostumbró a esperar un mensajito de buenas noches…si pasaban varios días sin que la vida los cruce…le faltaba algo…comenzó a extrañarlo….no era el nivel de adrenalina en que la había mantenido siempre su marido, era el hecho de que un hombre la mirara como a una joya, como si fuera única, la hacía sentirse  vulnerable, sencilla…linda en el sentido amplio…sacaba lo mejor de ella, no tenía que competir con nadie porque nadie podía ser competencia ante sus ojos…como le dijo unos meses después…estaba enamorado…le gustó en el momento en que la vio y al tratarla…se sintió perdido….nunca pensó que su matrimonio no era feliz…jamás podría entenderlo a su marido, tampoco como ella soportó esa competencia absurda para sostener lo insostenible.
Como una consecuencia natural a la entrega del alma siguió la del cuerpo…. Y ella supo lo que era hacer el amor…que le hagan el amor….realmente sentía todo lo que él le ofrecía y tomaba ávidamente para nutrirse, para volver a sentirse sana, importante para el otro…..
Su marido jamás sospechó…continuó en su mundo perfecto.
Hasta hoy….había una decisión que tomar….su compañero no la quería para algunas horas o de adorno social…. Ansiaba  una vida con ella, salidas con amigos, paseos, vacaciones, cine….leer en silencio, dormir abrazados.
Hoy era el día en que después de un cuarto de siglo de vivir a merced de lo que otro tuviera para darle…  ella cortaba el embrujo, su marido iba a tener que darse cuenta de que ella ya no estaba…no sería su ama de llaves, su enfermera, el remìs de confianza para sus adorados hijos, la amante siempre dispuesta complaciente y exigente….esta vez le tocaba a ella provocar pasión, entrega, amor….después de haber conocido lo que era hacer el amor…con quien te ama… ya no podía conformarse con un sentimiento  que jamás iba a llegar de la manera en que ella necesitó.
La historia con su querido “vecino de enfrente” llegaba a su fin….compartirían todo lo necesario como padres…. Pero nada más.
Ahora ella iba a tener a un HOMBRE a su lado.

Patricia Figura, julio de 2011

2 comentarios:

  1. Guauuuuu!!!!!!!!!! Felicitaciones!!!! para la nena bien y para vos! Me encantó!!! lo que debería haber sido un final triste para esa trilogía relatada, terminó siendo un final más que feliz!!! claro, para ella!

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  2. jajajaj.... la nena madurò....cambiò brillo por joya...me gustarìa ver la cara del marido cuando descubra que no tiene la vida comprada jajajja

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