viernes, 31 de mayo de 2013

LA FOTO

La Foto.

La miraba una y otra vez.
Le sonreía desde la pantalla.
Los ojos tan particulares, jamás había visto otros iguales.
O así se lo parecía a ella.
Pero ahora habían cambiado su expresión.
No es que no fueran diáfanos.
No es que no fueran risueños.
Pero algo había.
Un límite.
Algo que impedía al otro preguntar demasiado, acercarse, confundir las fronteras.
La pelota estaba de su lado.
Sabía que con solo dar una mínima señal podía iniciar una  ¿relación?...no, no exactamente eso…o sí, depende como se mire.
Al lado abrazándolo de manera ligera, sin necesidad de demostrar posesión, estaba su esposa…no mostraba resignación su sonrisa, al contrario, alegría, diversión, él sí parecía posesivo en el gesto.
¿O era idea suya?.
¿Por qué subía esa foto justo cuando habían tenido esa conversación?
¿Por qué cuando apartándose un rato del grupo le dejó bien en claro que le encantaría tener algo más con ella, algo privado, solo de ellos….un refugio, un secreto….un bunker de a dos?
“Para que no haya reclamos” le dijo su molesta voz interior.
“Para que sepas desde el principio como son las cosas”
“Para que cuando tomes la decisión de compartir lo que tengan para darse sepas que es solo eso”.
Sexo.
Sexo y catarsis.
Sexo y charla.
Tal vez alguna comida compartida.
Algo no encajaba.
Se los veía espléndidos.
No tenía dudas de que quería estar con él.
No solo le gustaba muchísimo sino que se divertía con sus comentarios y ocurrencias…. Pero ella estaba sola, no tenía familia propia, sus hijos eran grandes, tenían sus vidas muy al margen de la de ella…su ex marido era un ente.
No es lo mismo estar sola que sentirse sola teniendo a alguien.
¿Qué iba a pasar cuando lo necesitara y él estuviera de vacaciones con su mujer?
¿Iba a aceptar fines de semana soleados, espléndidos para recorrer rutas perdidas juntos y hacer el amor donde el rumbo los lleve….y saber que eso era imposible?
¿Por qué tuvo que subir esa foto donde se los veía tan bien juntos???
“Para que aceptes el combo y no haya facturas”.
Frustrada comenzó a escribirle un comentario “hermosa pareja, se los ve bárbaros”….
Lo borró con bronca.
“Qué bien se los ve…están iguales “.
Lo borró… ¿iguales a qué?.
Estaba inquieta.
No se quería quedar con las ganas nuevamente.
Tuvo su oportunidad años atrás.
Pero en ese entonces ella no se planteaba estar a la sombra de nadie, ni por celos, ni por dignidad.
Ahora pareciera que ambas cosas estaban dominadas.
O casi.
No estaban etiquetados…. La subió él ex profeso.
Tenía ganas de tirar el visor por la ventana.
La voz la mataba….su voz, su manera de mirarla, el deseo por ella que no se molestaba en disimular.
¿Su mujer sabía que nunca había sido la única?.
Era la única.
La que contaba, la que en definitiva lo tenía desde hacía más de quince años durmiendo a su lado, viajando, compartiendo, disfrutando sus hijos, su familia.
Tal vez él se había arrepentido de su ¿invitación?.
La foto  a lo mejor era la sutileza para que él no fuera de ella.
Fue hasta la heladera, miró como si por arte de magia al abrirla pudiera aparecer algo distinto a lo que había hacía media hora.
Lavó una manzana verde y la mordisqueó.
Él la seguía mirando sonriente, pícaro…abrazando a su mujer.
“Esto es lo que hay”.
¿Por qué ella que no tenía compromisos ni ataduras iba a conformarse con eso?
Ella necesitaba un par, un compañero, alguien que vaya al cine, salga a cenar con otras parejas, a bailar, a caminar, dormir juntos, encontrarse a la madrugada a hacer el amor.
“Él ya tenía todo eso”.
¿Entonces? ¿Para qué la quería a ella?.
Porque le gustaba mucho, eso era indudable, porque si se empeñaba podía tenerla, para matizar, para no aburrirse, para seguir sosteniendo un matrimonio largo, para……
¿Qué obtenía ella?
Ratos de placer…. A merced de cuando el otro lo decidiera.
No iba con su carácter…. Pero tampoco estaba dispuesta a un no….sus ganas de estar con él ya se habían vuelto casi inmanejables.
Apagó con bronca la compu.
¿Estaría pensando en ella? ¿ Tendría otras amantes? .
Fue a darse un largo baño… a relajarse…por el momento dejaba la puerta abierta…sabía que de haber un herido iba a ser ella.
Aunque supiera de antemano cómo eran las cosas.
Tómalo o déjalo.


Patricia Figura, mayo de 2013

lunes, 20 de mayo de 2013

LA SEGUNDA ESPOSA....


La Segunda Esposa.

No se sentía muy bien.
Le dolía mucho la nuca, el cuerpo en general, detrás de los ojos….
Hacer la cena le llevó un esfuerzo titánico.
No le gustaba dejar los platos para el otro día, así que apenas terminaron de comer y los chicos subieron a sus habitaciones para hablar por teléfono, jugar a la play o repasar para el día siguiente antes de dormir, quedó sola en la cocina… ¿su cocina?... ordenó y dejó la mesada impecable, guardó lo que había quedado de la tarta de zapallitos, un par de choclos en mantecados y dos milanesas.
Su marido estaba fuera de la ciudad esa noche por cuestiones laborales.
Volvería al atardecer del otro día.
Miró a través de la ventana que estaba sobre la  bacha, se veía la vereda de enfrente de esa calle tranquila…iba a extrañar todo eso…una parte suya nunca volvería a ser la misma.
Se preparó un té de manzanilla para llevar a su habitación, revisó puertas y ventanas, dejó la luz de la escalera encendida por si alguno de los chicos bajaba durante la madrugada… había finalmente aprendido las costumbres.
Un año después, una parte de ella se había transformado en otra persona… el fantasma siempre presente de una mamá perfecta, una primer esposa ideal, una vecina querida por todos….era demasiado el lugar que intentó ocupar… le quedaba grande.
Jamás había renunciado en su vida a nada.
Las clases de danza para las que no tenía una elasticidad natural, le habían costado el triple que a la mayoría de sus compañeras…. Siguió firme y terminó airosa, el profesorado que estudió mientras trabajaba, le costó noches sin dormir para llevar la carrera al día, pero se recibió y consiguió un trabajo mejor.
Logró comprar su propio departamento y su coche, nada de lujo, pero suyo.
Nada la desanimaba, buen humor natural, compañera, divertida, franca…amiga de sus amigos, siempre presente en la vida de su familia.
Pero se había metido en camisa de once varas.
Por amor.
Absolutamente por amor.
Dos años atrás, cuando cambió su viejo primer coche por uno más nuevo, conoció al dueño de la agencia mientras tramitaba los miles de papeles que le pedían, indignada ante tanta burocracia le preguntó si no necesitaban el buco dental también… para su sorpresa, él esbozó una sonrisa de caramelo…y una tristeza increíble en sus ojos dulces.
Formulario va y formulario viene, él descubrió que era en los únicos momentos en que sonreía, en que su pena se encapsulaba… ella no hablaba de otra cosa que no fuera de él con sus amigas.
La invitó a cenar, charlaron de todo y de todos, resultaron tener varios conocidos en común.
Le preguntó ya más relajados y disfrutando un buen vino de sobremesa con postre incluido, porqué parecía siempre tan triste.
“Es mi estado habitual” “Si no fuera por los chicos… creo que no hubiera vuelto a salir de casa en mucho tiempo”.
Había enviudado hacía no mucho tiempo.
Buena esposa, familia feliz, crecieron juntos, participaban de todo lo de sus hijos… estaba perdido, a la deriva y los chicos en el mismo barco que él.
No encontraba explicación… daba vueltas como zombi… se olvidaba del millón  de cosas que su esposa hacía con naturalidad…que aparecían como magia… las reuniones escolares, de futboll, de patín, las piyamadas, las firmas de último momento autorizando excursiones, los regalos para los cumpleaños eran una tortura aparte, elegidos a los apurones y la mayoría de las veces inadecuados.
“Se vino el mundo abajo” “¿Por qué una mujer muy joven, buena persona, excelente madre muere un día sin previo aviso dejando una familia sin timón?”.
Un accidente.
Los chicos ayudaban mucho.
Pero estaban desolados.
Las abuelas no demasiado cerca ni lo suficientemente activas como para suplir nada.
Ella escuchó.
Lo invitó a tomar un café en su departamento.
No pudo evitar tomarlo entre sus brazos como había fantaseado desde que lo conoció.
Le dolía el cuerpo de esperar ese momento…sentía una necesidad física de sentirlo plenamente, de tocarlo y disfrutarlo… le costaba creer que por fin ese momento podía llegar.
“No se si puedo” dijo él…últimamente los únicos momentos buenos eran los que pasaba con ella… no la apartaba de sus pensamientos.
Pasaron horas descubriéndose, gozándose…. Era mil veces mejor a lo que había imaginado… él se prendió a su belleza, alegría y juventud como si fuera a una balsa.
En los meses siguientes hicieron malabares entre los trabajos, las obligaciones de él dentro y fuera de la ciudad y los chicos, para verse.
Se la presentó a sus hijos.
El olfato infantil a full.
Una fría cortesía que la lastimó más hondo que cualquier otra cosa en toda su vida.
“Dales tiempo… extrañan horrores a su mamá…aún sienten su perfume en un par de prendas que atesoran, siguen fielmente lo que ella les enseño, jamás se acuestan sin bañarse aunque la hayan hecho renegar mil veces por el mismo motivo, salen con camperas aunque antes desataran guerras por no querer abrigarse, lloran en silencio…en cada rincón de la casa está ella, los cuadros, los adornos, los escritoritos de sus habitaciones, la ropa…. todo lo eligió ella.”
Antes del año le pidió que se casaran… ella absolutamente enamorada y optimista aceptó… eran niños, necesitaban amor, y ciertamente jamás dudó del amor de él y su incansable manera de demostrárselo con miles de atenciones y sobre todo en la cama.
Con entusiasmo, empeño y la mejor disposición se mudó a la casa de la primera esposa.
Pese a que jamás había tenido hijos propios, enseguida intentó estar en todos lados a la vez como si fuese realmente la mamá de los chicos…ellos meneaban la cabeza ante sus torpezas, inexperiencias y pequeños logros.
“Mamá mezclaba bien la leche con chocolate en una taza y después le agregaba el resto así no se hacían  grumos”.
“Mamá no me dejaba ir a la escuela con estos globos en la cabeza”.
“Mamá no me dejaba leer hasta tarde, después cuesta levantarse”.
“Mamá sacaba la carne del freezer antes de salir a trabajar, así no teníamos que comer siempre arroz con salchichas”.
“Mamá no se olvidaba de los turnos”.
Mamá era cada día más perfecta y ella aún descuidando su propio empleo, su tiempo de charlas con amigas que era sagrado, sus sábados de remolonear hasta tarde, no lograba llegarle a los talones.
Así durante un año.
No quería mezclar a su marido en el tema con los chicos.
Pero ella ya no aguantaba más.
Necesitaba un tiempo sola,  alejada, donde no se sintiera que hacía todo mal en esta familia heredada a un fantasma perfecto.
Subió a su cuarto con la taza de té.
Pasó por el cuarto de los chicos.
Dormían. Los amaba. Los entendía. Pero no daba más.
La lealtad que creían deberle a su madre les impedía demostrar el más mínimo afecto hacia ella.
Luego de recibir la llamada de su esposo, amoroso, compañero, único….se durmió pensando en cómo decirle su decisión y mostrarse firme para no desistir… se estaba enfermando…por momentos no sabía bien quién era en realidad.
Tuvo pesadillas, sueño afiebrado… la cama era un revoltijo y sintió que alguien le taladraba la cabeza.
Se incorporó con dolor…. Eran golpecitos suaves en su puerta.
“Qué te pasa?...no te levantaste y es muy tarde” ¿podía ser cierto que había preocupación en la voz infantil?.
“Tenès la cara hinchada…¿estuviste llorando? ¿lo extrañas a papá?.
“Me siento mal… debo estar con gripe o algo así.”
“ Te vas a morir?”…¿una nota de miedo?
“Por supuesto que no me voy a morir.”
“Nosotros sabemos hacer un té… si querès te lo subimos en una bandeja”…¿era real o estaba soñando?. “Y también sabemos donde están los remedios… si querès te traemos la caja y buscàs algo para el dolor”.
Timidamente se fueron acercando a la gran cama… eran tan chiquitos…parecían tan indefensos en esos piyamas demasiado grandes que ella les había comprado.
Los vio desdibujados por las lágrimas…¿estaría soñando?.
El primer gesto de afecto, de preocupación en tanto tiempo.
“Papá dijo que siempre vamos a amar a nuestra mamá… y que ella está orgullosa de nosotros… y que está contenta porque vos nos cuidas a todos cuando ella ya no pudo estar más”.
“¿Cuándo les dijo eso?” “Siempre… lo dice siempre…”.
Extendió sus brazos, la cabeza le dolía horrores y los ojos inundados de lágrimas que no había vertido en tanto tiempo, parecían se dos tajos en su rostro.
Ellos se acercaron muy lento y se dejaron abrazar… era algo.
Era mucho.
“Voy a prepararme el té…no quiero que se quemen… después me voy a dar una ducha, y si quieren podemos ver unas pelis todos en la cama, comer arriba y esperarlo a papá”
Asintieron, pero no se separaron de su cuerpo tibio… les acarició el cabello sedoso como había querido hacer tantas veces… los besó despacio.
“Lo único que hay que darle al tiempo… es tiempo…una escaramuza no es la guerra… pero una batalla ganada, es un buen comienzo”… se sintió optimista…todo terminaría saliendo bien.


Patricia Figura, mayo de 2013

Hace muchos años atrás, leí un libro que quedó atesorado en mi mente, se llamaba “La segunda mujer”… hoy tuve este tema dándome vueltas y este es el resultado.

viernes, 17 de mayo de 2013

SUBE Y BAJA....


SUBE Y BAJA…
Daba vueltas por la casa mientras distraídamente ordenaba una que otra cosa fuera de lugar.
Algo que no lograba hacer con sus pensamientos, hilarlos, seguir un ritual, acomodarlos.
Todo lo que hacían los demás le parecía más fructífero, válido, justificado.
Todo lo remunerado económicamente entraba en la escala de valores general.
Dar amor, tiempo y paciencia carecía del derecho a jubilación.
Para la mirada externa era entretenerse, matar el tiempo, pavear.
Para ella era su vida, su mundo imperfecto pero amado.
Y si hoy es el último día?
Cómo quiero pasar el último día de mi vida?
Salió al jardincito a juntar las hojas esparcidas por las brisas otoñales.
Vio que la pareja de enfrente salía a trabajar, la carnicería todavía no había abierto, el mercadito recibía las medialunas calentitas.
Sus hijos en el colegio.
Su esposo trabajando.
Ella rehén de sus propios planteos.
¿Todo el mundo pensará tanto?
¿O se limitan a barajar el día?
¿Hacen un análisis de lo que necesitan?
¿O siguen el curso que vienen determinando desde años?
Embolsó las hojas junto con algunas flores secas.
La chica que la ayudaba con la limpieza hizo caer algo en la habitación del fondo.
“Espero que esta vez no sea caro lo que rompió”.
Entró y se preparó un café, se sacó el pijama y se puso ropa deportiva, cómoda.
Se miró al espejo.
Tenía sus días, hoy no se veía bien.
Le parecía que tenía los ojos hinchados, la raíz del cabello se le iba para cualquier lado…¿qué veía su marido?
¿Qué era lo que lo excitaba tanto en ella?
¿Qué veía cuando le brillaban los ojos y la abrazaba?
Ya no era como antes…no se sentía como antes.
Nunca le pesó la edad, tampoco nunca la aparentó, de constitución menuda, rasgos clásicos, mirada dulce, tonificada….¿sería el cambio de década tan próximo?
Joven pero también fuera del juego para muchas otras cosas.
Miró el café y decidió que no tenía ganas de tomarlo.
Escuchó la aspiradora en la planta alta, parecía forzada, como trabajando en vacio.
“Voy a salir a caminar”.
Se sentía deambulante en su propia casa, inquieta, molesta.
Sabía que después llegaría la hora de la comida, las corridas, los horarios de los más chicos, los mandados, las clases de yoga y pintura….volvería a su centro, a su eje.
Estaría otra vez arriba.
Pisando fuerte, charlando divertida con sus compañeras de clase, proponiendo salidas de chicas, cambiando datos de negocios, nutricionistas, películas, maestras particulares, etc.
Había que subir.
En este momento estaba abajo, tal vez el cielo gris, cargado, el viento húmedo, caliente.
Se sacó las pantuflas, las guardó en el mueblecito de los zapatos, buscó sus zapatillas preferidas.
Le avisó a la mucama que volvía enseguida.
Comenzó a buen ritmo, el carnicero levantaba la ventana y la saludó con un guiño, siempre tenía un piropo para ella, la vecina nueva  estacionó de cualquier manera y voló literalmente hacia su casa, las viejitas del barrio con sus changos un poco más modernos, seguramente regalo de los hijos, se saludaban y cambiaban un par de palabras, cuando pasó por la mercería se acordó que no tenía medias oscuras para la cena del fin de semana que organizó el jefe de su esposo.
Estaba en marcha.
Subiendo.
Con suerte al final del día, se reencontraría con toda su familia con las pilas puestas y la sonrisa que acostumbraban a ver en su rostro.

Patricia Figura, mayo de 2013

lunes, 6 de mayo de 2013

EN MIS SUEÑOS...


En mis sueños.

_Pero no te entiendo, ¿desde cuando es toda esta locura?_
_No se, puedo decirte que desde siempre, desde que volví a verlo, desde que nos mantenemos en contacto…. No sé, la verdad es que me agota._
_Es como un juego? O estas medio paranoica?_
_Creo que lo manejo a voluntad, pero no estoy muy segura, me cuesta poner el freno, me enojo cuando las actividades diarias me cortan lo que estoy viviendo con él dentro de mi mente…. Espero la siesta, la noche,  cuando se que los teléfonos no van a sonar, que puedo seguir la  hilación de cada historia que me invento pero lo peor es que quedo tan exhausta y convencida de que compartimos tanto juntos.. que…que…_ bajó los hombros vencida, cansada y a la vez limitada para poder poner en palabras todo lo que tenía en su mente inquieta.
_Es obvio que las fantasías son necesarias, descomprimen, podes hacerte la cabeza con una Visa Gold, un viaje soñado donde no encuentres a NADIE CONOCIDO…. Un día entero sin revisar cuadernos, carpetas, llevar chicos al odontólogo, pediatra, actividades extraescolares….pero …¿una vida paralela?... no sé gorda, me parece mucho.
Estaban tomando sol de otoño, sentadas en el patio arbolado, con hojitas doradas en el piso, el juego de jardín las acunaba, la música variaba en el pent drive de los clásicos ochentosos a lo último de Winsil y Yandel… el mate iba y venía, medialunas con manteca para una, bizcochitos de gluten para la otra.
Se conocían desde antes de tener uso de razón.
Épocas donde se frecuentaban casi a diario y otras donde pasaban meses donde solo las llamadas telefónicas las mantenían unidas como por un invisible cordón maternal.
_¿ y a todo esto…. él no corta ni pincha?_
_Nooooooo…. Ni remotamente sospecha que es una fantasía para mi, y lo más curioso de todo es que de chicas nunca me gustó… ¿te acordas?_ le cambió la yerba al mate, ya flotaban los palos, estaba intomable.
_Al menos yo nunca lo sospeché…. Es más, tenía dueña _ ambas se rieron porque más de una vez le criticaban las novias, él era amigo en común de las dos y ellas le elegían TODO, desde el vestuario para los bailes del barrio, las novias, la música que iban a escuchar, la corbata para la recepción….él siempre sonriente, dispuesto, volátil, escurridizo… de alguna manera siempre conseguía quedar bien con Dios y con el diablo.
_Me divertía muchísimo pero ni pensar en otra cosa, para nada…era el típico compañero varón…. Estábamos muy cómodos juntos, los tres..la pasábamos lindo ¿no?_
_A lo mejor es eso lo que te pasa…. Extrañas la atmósfera de paz, confianza, tranquilidad, no corríamos riesgos… ahora uno no sabe cómo llega al final del día, si tu familia va a estar completa o a merced de algún loco drogado, nuestros hijos con todo el bagaje de problemas heredados más sus propias decisiones para el futuro…lo que cuesta mantener lo que se logró, las traiciones y demandas laborales, los parientes que en un momento están todos reunidos para el asado y en otro se arma la rosca sin saber uno en qué momento explotó todo….nadie tiene paciencia, tolerancia…los noticieros apestan, las necrológicas asustan…. Antes el promedio de vida eran los setenta, ahora es impresionante la franja de cuarenta a cincuenta con ataques cardíacos o acv….y vos nunca fuiste una roca precisamente, la realidad siempre te agotó…. Has negado hasta lo que te bailaba en los ojos…._ se inclinó hacia un costado para verla, no era usual que estuviese tan callada…la vio con los ojos entornados y una semisonrisa dibujada en sus labios.
_Bueno, te fuiste mal_ revoleando los ojos, esperó hasta que la otra tuviese ganas de conversar… alzó el pequeño gatito, último integrante en la familia de su amiga.
_Será como yo lo imagino? Haciendo bromas para hacerme enojar y después un beso largo, una caricia…la reserva en una cabaña escondida entre árboles frondosos donde quedar ocultos todo un fin de semana…¿seríamos capaces de llegar a algo más?_
_Uhhh….y porqué con él? eso es lo que no entiendo… porqué fijaste tu escape ¿sexual? ¿genital? ¿romántico?.... en alguien que viste cinco veces a lo sumo en los últimos años…¿vos te das cuenta de que esto está sólo en tu mente? Es una historia no escrita, pero no deja de ser eso y nada más….¿o me estás ocultando algo?_ quedó con la medialuna suspendida en el aire, no la creía capaz de tener un amante, al menos no en el terreno literal de la palabra.
La otra se rió, con esa carcajada que las tentaba a ambas.
_Por supuesto que es sólo imaginación…. Creo que por eso es tan lindo… dice las palabras justas, me mira como quiero que me mire….propone todo lo que me gusta…_
_ Bueno, entonces no es él…..es un muñeco con un libreto… así cualquiera es el hombre ideal._ como siempre, las bromas le ganaron a la tensión.
_Espero que se me pase pronto… a veces parezco ida… y lo más gracioso es que sé dentro de lo que se puede afirmar, es que jamás estaría con él…creo que como pareja seríamos antagónicos…..no sería lo mismo que la amistad que compartimos…. Y paradójicamente, estoy convencida que mi marido, con todo lo que me puede enojar de él… es lo mejor que pudo haberme pasado en la vida…. es el hombre más íntegro y enamorado con el cual compartí momentos importantes._
_Es un flor te tipo, inteligente…. Le puede tener celos a tus fantasmas, pero nunca miedo, es muy seguro….vos lo único que haces “en tus sueños” es descomprimir lo que no podes o tenès fuerzas para modificar….te aíslas hasta que ganas fuerza para salir a la lucha…. Son estilos._
_Che, este mate está horrible otra vez_
_Si, me va a agujerear el estómago_
_ Te ayudo a descolgar la ropa antes de irme, asì paso por la carnicerìa antes de buscar los chicos de mi suegra_
_Dale, me parece que esta noche hay tormenta_
_Mmmm que lindo… para tener un sueño romántico…_
_Y para qué soñar si podes hacerlo realidad??? Los chicos durmiendo y uds dos dando un buen final al día_
_Si, es cierto, siempre y cuando el cansancio no nos venza primero.
Terminaron de juntar las cosas del patio, doblaron la ropa mientras una preparaba la retirada y la otra se fijaba qué había para preparar la cena, ya les había hecho milanesas y puré dos veces esa semana….no daba para una más.

Patricia Figura, mayo de 2013

viernes, 3 de mayo de 2013

aprendiendo..... de Jorge Luis Borges.

“Después de un tiempo, uno aprende la sutil diferencia
entre sostener una mano
y encadenar un alma;
Y uno aprende que el amor no significa acostarse,
y que una compañía no significa seguridad,
y uno empieza a aprender…
Que los besos no son contratos y los regalos no son promesas,
y uno empieza a aceptar sus derrotas con la cabeza alta
y los ojos abiertos,
y uno aprende a construir todos sus caminos en el hoy,
porque el terreno de mañana es demasiado inseguro para planes…
y los futuros tienen su forma de caerse por la mitad.

Y uno aprende que si es demasiado
hasta el calor del sol puede quemar.

Así que uno planta su propio jardín y decora su propia alma,
en lugar de que alguien le traiga flores.

Y uno aprende que realmente puede aguantar,
que uno es realmente fuerte,
que uno realmente vale,
y uno aprende y aprende… y así cada día.

Con el tiempo aprendes que estar con alguien
porque te ofrece un buen futuro,
significa que tarde o temprano querrás volver a tu pasado.

Con el tiempo comprendes que sólo quién es capaz
de amarte con tus defectos y sin pretender cambiarte
puede brindarte toda la felicidad

Con el tiempo aprendes que si estás con una persona
sólo por acompañar tu soledad,
irremediablemen-te acabarás no deseando volver a verla.

Con el tiempo aprendes que los verdaderos amigos son contados
y quién no lucha por ellos, tarde o temprano,
se verá rodeado sólo de falsas amistades.

Con el tiempo aprendes que las palabras dichas en momentos de ira
siguen hiriendo durante toda la vida.

Con el tiempo aprendes que disculpar cualquiera lo hace,
pero perdonar es atributo sólo de almas grandes.

Con el tiempo comprendes que si has herido a un amigo duramente
es muy probable que la amistad nunca sea igual.

Con el tiempo te das cuenta que aún siendo feliz con tus amigos,
lloras por aquellos que dejaste ir.

Con el tiempo te das cuenta de que cada experiencia vivida,
con cada persona, es irrepetible.

Con el tiempo te das cuenta que el que humilla
o desprecia a un ser humano, tarde o temprano
sufrirá multiplicadas las mismas humillaciones o desprecios.

Con el tiempo aprendes a construir todos tus caminos en el hoy,
porque el sendero del mañana no existe.

Con el tiempo comprendes que apresurar las cosas y forzarlas a que pasen
ocasiona que al final no sean como esperabas.

Con el tiempo te das cuenta de que en realidad lo mejor no era el futuro,
sino el momento que estabas viviendo justo en ese instante.

Con el tiempo verás que aunque seas feliz con los que están a tu lado,
añorarás a los que se marcharon.

Con el tiempo aprenderás a perdonar o pedir perdón,
decir que amas, decir que extrañas, decir que necesitas,
decir que quieres ser amigo, pues ante
una tumba, ya no tiene sentido.

Pero desafortunadamente, sólo con el tiempo…”
— Jorge Luis Borges - Aprendiendo.