sábado, 18 de febrero de 2012

ENAJENADA....

ENAJENADA
Se daba cuenta sólo cuando su mente se hallaba a km de distancia.
Una idea sensual para su ánimo inquieto, algo a qué asirse mientras la realidad la golpeaba con un problema agobiante, un contratiempo difícil de resolver, algo que no tenía ganas de enfrentar .
Aparecía una imagen en su mente, le daba vueltas, se imbuía…buscaba caer en algo seductor, atrapante, una aventura, un viaje, el diseño de un jardín, un cuadro para pintar, una película…protagonizar una pasión prohibida, pero situándola en un momento de su vida en que estuvo libre para amar, esa era la más recurrente a medida que pasaban los años.
Mientras el problema de turno pujaba por salir a su realidad, ella lo empujaba a un lado, se aferraba más fuerte a su fantasía de turno, a su idea, le agregaba detalles, la revivía, se perdía en ese laberinto  a pesar de las continuas interrupciones cotidianas.
Mientras iba a su trabajo, intentaba concentrarse en él, hacía las compras, ayudaba con la tarea escolar;  buscaba el refugio de un lugar apartado, donde no llegaran tanto los ruidos, las demandas.
Se recostaba a tomar sol…. se nutría como si fuese una planta en pleno proceso de fotosíntesis, y todo su mundo interior cobraba forma…se sonreía, disfrutaba, se perdía.
Cuando ya no daba para más, le costaba que su mente siguiera en ese lugar, aparentemente seductor y con conflictos sólo del tipo atractivo atractivo…. Elección difícil pero cualquiera sea el planteo era de lo bueno hacia lo mejor.
Pero los inconvenientes y la realidad se filtraban… de alguna manera iban ganando peso en la balanza, atraían más su atención y la enajenada historia comenzaba a debilitarse, a agotarse, se resquebrajaba y por los resquicios luminosos aparecían los desenlaces reales, lo que hubiese pasado en verdad de ser eso cierto… los  problemas que se hubieran suscitado, el desgaste propio de cada situación exaltada… el final.
Entonces algo de fuerza cobraba en su interior después del descanso mental, las desdichas no le parecían tantas ni tan graves, llegaba una buena noticia, una llamada amiga, una esperanza de cambio… la realidad la tomaba fuerte de las muñecas y la arrastraba hacia su vida, la de la mente hacia afuera, entonces vaciaba cajones, ordenaba placares, limpiaba los pisos, salía a caminar, iba de visita a lo de sus amigas, organizaba encuentros entre parejas para salir el fin de semana, se arreglaba, se divertía, buscaba soluciones …sólo las que podía, las que dependían de ella, luchaba por cambios en su familia, en su entorno, en su trabajo en su pareja.
Y por un tiempo les regalaba el placer y la gloria de un tiempo de relativa paz a los suyos, todo parecía mejor, más tranquilo, la venda por un tiempo seguía en su lugar y nada la llevaba a luchar contra las almas ajenas, las mezquindades que la rodeaban, las incapacidades que hacían que su mundo trastabillase por decisiones de otros con consecuencias directas sobre su vida.
Hasta que un nuevo golpe, una nueva desazón, sacudiera la frágil puerta mental que la mantenía a flote y le urgiera sumergirse una vez más a su mundo privado, seductor, donde no había dolores, tristezas, inseguridades, fealdad ni traiciones.
Sólo paz, belleza, armonía y brazos seguros que la abrazaran para compartir su jardín tan privado como prohibido.


Patricia Figura, febrero de 2012

4 comentarios:

  1. Guau! Qué historia!!! Mejor no preguntar detalles...

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    1. jajajaj, pregunte nomàs.... es puro cuento.
      o conocès alguna persona que viva dos vidas a la vez?

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  2. Respuestas
    1. hola Ale! si es que sos la Ale que yo creo, sino, bienvenida totalmente. gracias por ver "reales" a mis cuentos.

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