domingo, 13 de noviembre de 2011

UNA CIERTA SEÑORA.... de Guy Des Cars.

En mi adolescencia, conversando con una de mis amigas, Nancy, me comentò que estaba leyendo un libro que era "rarìsimo" pero que estaba muy bueno.
Me comentò el tìtulo y su argumento, para la època, hace veinticinco años atràs, era muy de vanguardia.
Cuando ella volviò de su viaje a Bariloche, con la familia, me lo prestò.... me atrapò, pero nunca màs lo encontramos en la biblioteca, estaba viejo, y yo personalmente no me acordaba su autor, ahora lo googlee y aquì va el resumen que encontrè y por supuesto su autor de quien he leìdo mucho en otros tiempos.

besos.






Dominique nació a pesar de la rotunda oposición de su padre, un marino que dejando en cada puerto un amor, jamás asumiría semejante responsabilidad.   Esta gran frustración genera en la mujer tal resentimiento hacia los hombres que jamás podría aceptar el hecho de parir un varón.  A pesar de la angustiosa espera ella continúa con su embarazo  hasta el final y al enterarse de su hijo, en el mismo momento del nacimiento, elige sin dudar un nombre ambisexual "Dominique" .
 A partir de este momento su madre lo viste y educa conforme a una niña, jugando con muñecas y peinando  su cabello con bucles y trencitas.
Llegada  la pubertad  van juntas a visitar a un médico especialista que, teniendo en cuenta la particularidad del caso, le suministra a la joven un tratamiento con hormonas, acentuando de este modo  sus rasgos femeninos.
Unos cuantos años mas tarde, ya hecha toda una mujer, decide trabajar en un cabaret, deslumbrando con su belleza y femineidad a cuanto espectador participa de su show, en el que antes de salir a escena esconde debajo de su malla de baile sus atrofiados genitales masculinos, parte intima de su cuerpo que comienza  a rechazar.  Luego de grandes conflictos y miedos Dominique decide operarse para lograr ser una mujer completa, entonces viaja hacia una clínica especializada en este tipo de plásticas y se interna.   Su alegría se empaña cuando observa barrotes en el cuarto y  escucha fuertes gritos de dolor provenientes de otras habitaciones pero a esta altura de los acontecimientos nada la haría cambiar de opinión.   Al despertar de la anestesia comienza a comprenderlo todo, los dolores son tan insoportables  que no hay calmantes que los puedan mitigar, Dominique llega hasta  la desesperación.   Finalmente regresa a su vida totalmente renovada,  conoce a un hombre del que se enamora siendo correspondida por él, se casan y planean un hijo.  Ella va aumentando su vientre con almohadones a medida que pasa el tiempo hasta que a los nueve meses se interna en una maternidad, recoge a su hijo adoptivo y junto a su marido regresan a su hogar para empezar una nueva vida.  
 
  
extraido de google.

No hay comentarios:

Publicar un comentario