martes, 2 de noviembre de 2010

VECINOS DE ENFRENTE... TRES.

Vecinos de Enfrente…( tres.)

Noche de viernes… peña con los compañeros del trabajo, el grupo de viajantes, los que aprovechaban cuanto viático se presente y a fin de año competir a cuál más imponente el cuatro ruedas que los llevaría de vacaciones… salvo claro que estas fueran en el exterior fuera de los limítrofes.
Dos días a la semana estaba ausente seguro, las tardes restantes, una hora de gym ( para mantenerse en forma, saludable y atractivo) y otra de tenis.
Los domingos almuerzos en el club con ambas familias paternas, sábados salidas con amigos, es decir, con grupos de “gente bien”, donde se sacaban chispas entre ellos mientras las mujeres actualizaban cirugías, dietas, moda y algún que otro amante no tan escondido.
Estaba mucho tiempo sola, muchísimo, al principio de su matrimonio, enamorada de uno de sus vecinos de enfrente, del mayor, tan apabullante, y seductor como inescrupuloso y trepador, creyó que iba a poder mantener su idea de pareja segura de que él no iba a querer contrariar a su suegro, poderoso ejecutivo y superior  jerárquicamente en su trabajo.
Pero su padre, su adorado papá al parecer pensaba como él…sólo que ella no se conformaba con un bienestar material y tiempo  para caprichos y para los hijos como su propia madre tan satisfecha con su existencia, compartiendo con su marido ocasiones sociales y poco más.
Durante los primeros años, la intensa vida sexual que compartían los mantenía en un punto de encuentro relativamente cercano, intuía que todo iba a cambiar cuando tuviesen hijos así que los evitó cuánto pudo, no tenía nada de instinto maternal, no quería cadenas que la obligaran a permanecer en otra esfera, prestando atención a aburridos quehaceres que le parecían más propios de una empleada que de la joven esposa de un ejecutivo exitoso.
Hasta que él comenzó a presionar, era un final feliz más que anunciado…y el suegro quería nietos!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!.
A escondidas se cuidaba, mientras que aprovechaba la situación para atraerlo permanentemente a su  cama, fue una  época relativamente feliz ya que podía vivir la engañosa fantasía de una esposa buscada y asediada por un marido que la tenía más que enamorada…obsesionada.
Al no obtener resultados, el obsesionado pasó a ser él… no estaba acostumbrado a que no se hiciera su voluntad o que lo desafíen.. así fuera la madre naturaleza.
Cuando la armonía entró en peligro… ella capituló, dejó de cuidarse y antes de transcurrido un año  su primer hijo hizo una ruidosa y triunfal aparición en el mundo perfecto de su ambicioso marido.
Comenzó la vorágine de mamaderas, chupetes, bautismo, opiniones de una madre, de la otra, y el orgulloso padre y abuelos organizaban el futuro del primogénito.
Por supuesto su cuñado, antes su enamorado secreto fue el padrino, una tía ricachona y soltera de ella la madrina… y ella sentía que no tenía nada que ver con todo eso.
Se casó tratando de sostener una fantasía, una novela rosa, donde la joven caprichosa y rica obtiene su premio mayor… el marido que la tenía loca y que era el codiciado por todas sus amigas.
La señora joven, que viajaba y paseaba por todo el mundo, moderna, linda, fina y con la escolta ideal, familia unida, casa grande con el tiempo, los mejore clubes y un marido absolutamente a merced de sus caprichos… y por si fuera poco, el cuñado, adorable, simpático, alegre y muy atractivo… enamorado de ella.
Se sentía vacía, tonta, banal… y lo era.
Estaba sola, sus amigas siguieron estudiando, trabajando, labrando un futuro de verdad, eran capaces de sostenerse a sì mismas, eran independientes, algunas se casaron por amor, otras se dedicaron a sus profesiones y a viajar… otras, las menos, a  ambas cosas.
Ella no encajaba, en realidad nunca fue lo que soñó, tuvo épocas de autoengaño… donde el cuadro que le pintaba la realidad parecía perfecto.
Pero estaba vacío, no era real, su marido fue cumpliendo sus metas y estaba satisfecho como un gato,  a su manera la quería y estaba orgulloso de ella cuando  la presentaba en reuniones importantes socialmente, era linda, instruida, tenía buena conversación y en la cama era no sólo más que complaciente sino exigente también… claro, que ya no era la única… a medida que fue escalando posiciones un abanico de mujeres hermosas, trepadoras o influyentes se ofrecían para satisfacerlo y satisfacerse.
Noche de viernes… no llegaría hasta entrada la madrugada… haría todo en el mayor sigilo “para no despertarla”… como si ella pudiera dormir… mil una vez se planteaba la idea de si volvería a actuar de la misma forma, si daría curso a su capricho por un hombre que en realidad no la amaba con tal de tenerlo de alguna manera… de ser su “esposa”…su hogar.
Sabía que la respuesta iba a ser una y otra vez la misma.
Quince años después y con dos hijos en su haber… ella estaba enamorada de él, de su aparente caballerosidad… aún para ofrecer la retirada… jamás discutía… deslizaba un “ como quieras querida…me pareció una buena sugerencia, nada más” y dejando en claro que no estaba satisfecho, se excusaba y se retiraba “a trabajar”… “alguien tiene que mantener esta familia que no es económica precisamente”.
En realidad algo sí cambiaría… ya no necesitaba los oropeles ni la vida tipo portada de revista de moda… daría todo lo material por una casa sencilla, hecha de a dos y no por decoradores pagos, proyectos compartidos para ir progresando juntos, la mesa familiar sin tanto melindres ni ostentaciones, impaciencia por ir  a la cama… los dos… como si él realmente viera por sus ojos, como si la amara más allá de toda razón o límite…daría todo lo que tenía por poder confiar en él cuando le ofrecía excusas con esos ojos claros , acerados, impenetrables y que aún después de tantos años le provocaban un nudo en el estómago, la excitaban.
Sintió el ruido del portón al abrirse, entraba el coche, se fijó la hora…  la madrugada, escuchó que se servía un vaso de agua….subía las escaleras, dejaba los zapatos en el descanso, espiaba a los chicos, los tapaba, entornaba la puerta de ellos, les apagaba el velador, sintió su perfume fuerte, varonil cuando entró al dormitorio, fue directo al baño, oyó  correr el agua de la pileta, su ropa caer, la llave de la luz al apagarse… el colchón que se hundía suavemente cuando se acostó a su lado… giró despacio… se recostó contra su pecho en silencio, él se sorprendió pero no lo molestó… al contrario, comenzó a tocarla como a ella tanto le gustaba, enseguida se enredaron sin hablar en un juego de gemidos, manos urgentes, labios ávidos de recibir al otro, hicieron el amor con furia, con rapidez, como midiendo voluntades para quedar relajados y en total silencio uno sobre el otro… hasta que la respiración fue haciéndose mas regular …vencidos por el sueño, una vez más se quedaron dormidos.

Patricia Figura, noviembre de 2010

10 comentarios:

  1. Muy bien escrito Patricia. Un relato que se las trae. Gracias

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  2. gracias a vos norma, por tomarte el tiempo de leerme y tener la generosidad de comentarme.
    es la tercer parte de una trilogìa, "vecinos de enfrente", "nena bien" y este ùltimo, los otros estàn en el mes de agosto.

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  3. PATRI ME ENCANTÓ,PERO NO ME DEJES CON LA DUDA...QUE PASÓ???? COMO SIGUE?
    REALMENTE GENIAL.
    RITA

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  4. PATRI ME ENCANTÓ...PERO NO ME DEJES CON LA INTRIGA,QUE PASÓ??
    COMPARTO PLENAMENTE EL PENSAMIENTO DE ELLA Y (TUYO) SIN AMOR ,DE QUE SIRVE TENER DINERO,ETC...
    MUY BUENO TUS CUENTOS.
    RITA

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  5. PATRI ME ENCANTÓ.FELICITACIONES!!
    PERO NO ME DEJES CON LA INTRIGA,QUE HABRÁ PASADO,QUE DECISIÓN HABRÁ TOMADO ELLA??
    BESOS.RITA

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  6. la verdad riri... ignoro como habrà seguido su vida... si querès me lo podès sugerir y se viene "vecinos de enfrente" cuatro! jajaj besos

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  7. y si! tenés que hacer el cuatro! así no cierra! nos venis acaramelando con la historia, ahora tenes que contar su decisión!

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  8. salvo que pase un huracàn por la cabeza de la mina... no se... me parece que aprendiò a tomar lo que puede tener....no la veo muy "revolucionaria" jajajaj.

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  9. AMERITA UNA CUARTA PARTE.ME DEJÓ GUSTO A POCO.

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