martes, 24 de abril de 2012

SOLOS... LOS DOS... EN EL HOTEL.


Solos…los dos…en el hotel.

Estaba firmando las notas de los cuadernitos de comunicaciones, supervisando el pollo que se cocinaba lentamente y ayudando a su hija menor con la tarea, cuando su esposo entra a la cocina con cara de esconder algo…algo grato.
Lo mira, le da un beso y le señala la pava para que comience con los mates de la tardecita, antes de seguir con la otra mitad del día, es decir, buscar los chicos de inglés, futbol, ir al súper, llamar a las “viejitas” para saber si todo estaba en orden, poner la mesa,  bañarse, cenar, mirar algo en la tele y POR FÌN… llegar a la cama, al descanso.
_A que no sabès lo que me gané?_ le dice él, impaciente e incapaz de guardar por más tiempo la sorpresa.
_Entradas gratuitas a la cancha para todo el año_ le contesta en un tono como diciendo ¿qué otra cosa te va a dibujar esa sonrisa?, ya fastidiándose un poco por las dudas tenga razón.
_NO...nada que ver, ¿ves cómo sos?.... ahora no te digo nada_ siguió preparando el mate y agregó_ traje estos biscochos que son una droga._
_¿No me ves la oreja que tengo llena de semillas? No puedo comer nada con harinas, qué me venís a decir de los biscochos?....bueno, dale, a ver, qué te ganaste?_ le repitió la indicación de la tarea a la hija que se entretenía viendo volar una mosca, con peligro de exaltar aún más a su cansada mamá.
_Mira…._ le extiende dos Boucher de un conocido hotel de lujo en la ciudad_ te conté que el hijo de un compañero mío trabaja acá, bueno, hace rato que le vengo diciendo que tenía ganas de llevarte un fin de semana….y bueno, hoy me los trajo, incluye el gym, el sauna, masajes, casino, y el desayuno._ se relamía satisfecho como un gato.
_Ahhh_ enseguida le cambió la cara, el factor sorpresa y más viniendo del ser querido, obra milagros._ qué bueno! me encanta… y para cuándo es?
_Para navidad_ le contesta él mientras le extiende el mate recién preparado
_¿¡PARA NAVIDAD?????!!!!!!!! Y para qué queremos para navidad? Mira si vamos a dejar a la familia para ir a un hotel acá a 20 cuadras…. Noooooooo que se los guarde… aparte faltan como siete meses…. Anda  decile que gracias._
Él invariablemente se empezó a reír y le hizo una broma a la hija que los miraba a uno y a otro pero de la tarea ni noticias.
_Es para este fin de semana, entramos el sábado al medio día y salimos el domingo después del desayuno…. Te parece bien?_ por los ojitos oscuros echaba chispas divertido… las bromas que le habían hecho sus compañeros de trabajo no eran aptas para menores y estaba de muy buen humor.
A ella le cambió la cara. Estaba entusiasmada. Feliz. Hacía planes mentales y los conversaba con él.
Al otro día retomó la rutina con otro sabor, habló con su madre y organizó la estadía de los chicos, las salidas, los teléfonos de quienes los llevarían y traerían de los compromisos que ya estaban tomados, el dinero para que maneje el más grande, el teléfono del pediatra, el del hotel, una vez más le hizo repetir a todos sus números celulares, pasó por lo de la esteticista y redobló las sesiones de electrodos, drenajes linfáticos, ultra cavitación, limpieza de cutis, con su amiga experta en productos de cosmetología.
Era una novia ambulante con todo el bagaje a cuestas de una esposa con casi veinte años de lidiar con casa, marido, trabajo e hijos.
Hasta último momento corrió con las necesidades de uno y de otro, a él le surgió un viaje que finalmente se postergó, lo único que no supo hasta dos días antes es si su amado equipo de futbol jugaría durante las horas en que él estaría “internado” con su esposa que ya parecía haber rejuvenecido diez años.
Prepararon un bolso cada uno, con prendas de gym, un par de mudas, ropa de vestir nueva, ella se encargó de comprarle una camisa muy canchera y desvalijó el negocio de lencería que tenía a un par de cuadras de su hogar.
Por algún motivo se ruborizó cuando le dieron  la tarjeta de la habitación…. en todos los años de casados, habían viajado siempre con los chicos, más de una vez compartiendo todos la misma estancia, conversando hasta altas horas o compartiendo una peli, pero esta era la primera vez que iban a estar tantas horas el uno sólo para el otro.
Les costó cerrar la boca.
Al entrar a la amplia y luminosa habitación los ojos no les alcanzaron para asimilar todo, como chicos descorrieron las cortinas, ya que al botones lo despidieron apenas dejó el pequeño equipaje, si bien el estilo era minimalista, la combinación en madera oscura y  tapizado claro, así como la moquete y el escritorio a juego, daba sensación de confort y amplitud…un plasma gigante los enfrentaba frente a una cama camera con almohadas mullidas y esponjosas, lo recorrieron todo, dejaron las luces bajas y apoyaron celulares, cámara de fotos y llave_tarjeta en la encantadora mesita baja con sillón señorial que repetía los colores del ambiente.
Era uno de los últimos pisos, se divisaba la ciudad, la laguna, a lo lejos uno de los parques pulmón del lugar y donde ella caminaba tres veces por semana.
_Al fin solos!- le dijo él riéndose…ella también se rió… parecía absurdo pero una vez ahí… era como que no sabía por dónde comenzar…”romper el hielo”_ querès que vayamos a curiosear?_ de la mano recorrieron las instalaciones, el vidriado gimnasio, donde hicieron un poco de bicicleta y cinta, pidieron turno para ella en el spa, no iba a perderse por nada una sesión de masajes, la tarde estaba hermosa, subieron a la piscina y se sintieron dueños del mundo, algo más para compartir después de tantos años… merendaron en unos de los livings bajo un gacebo blanco, frutas, jugos, y algunas delicias a las que no estaban habituados, volvieron a la habitación donde él preparó una bañera para dos, espumas, hidro… y el amor por primera vez en esa tarde robada al ajetreo habitual… por una vez no había chicos por llegar o por buscar, compromisos de peloteros, gente menuda en la habitación de al lado… estaban solos, sin apuro “como en la luna de miel” le dijo él mientras remoloneaban envueltos en las gruesas y cómodas batas con el logo del lugar.
_Si, con unos cuántos años más….canas, kilos y alguna que otra huella en el cuerpo_
_Bueno… qué querès? Si a los cuarenta estamos igual que a los veinte, quiere decir que alguien vivió por nosotros… aparte es mejor, ahora tengo más de donde agarrarme_ ella se rió y se quedó recostada contra él… el champangne estaba haciendo efecto y se sentía amodorrada…. Sumado  a todo lo que tuvo que hacer para lograr esas horas de relax….no pudo evitar un rato de sueño… pero estaba bien, no siempre podían hacer una siesta a las seis de la tarde… después se pondrían su ropa nueva, esa especial que había elegido y él no conocía todavía, cenarían en el shopinng del selecto lugar y darían una vuelta por el casino… causaba gracia que estuvieran a pocas cuadras de su hogar y tan lejos a la vez.
También hubo tiempo para planteos, demasiadas cosas por charlar postergadas por el devenir de los días interminables de obligaciones propias y ajenas, proyectos por discutir, recordar a los que ya no estaban, bromear con los alardes que harían frente a los amigos cuando se reunieran a cenar…hubo tiempo para mucho…una experiencia nueva…había que repetirlo.
El domingo amaneció diáfano, el sol entraba a raudales por los ventanales, se disfrutaron una vez más,  desayunaron como una pareja de recién casados en una íntima mesa de a dos… subieron a buscar sus cosas y el botones las acomodó en la camioneta, dieron un último vistazo al lugar al que cobraron cariño por lo que representó para ellos.
_Estuvo bueno_ dijo ella mientras rodeaban la rotonda para salir a la avenida que los llevaría a su hogar.
_Sabes cuál fue la mejor parte de todo?_ le dijo él mirándola de reojo.
_No…no sé…la falta de gritos de los chicos, que no gastamos una moneda salvo en el casino, el cielorraso sin humedad?_ le contestó riéndose.
_Vos…_le contestó guiñándole un ojo._ la mejor parte de todo lo que me pasa, siempre sos vos_.
La sonrisa de ella cada vez que recuerda  su respuesta… sigue siendo el premio para él, aún varios días después, en que los chicos, el trabajo y la rutina amenazan con invadir el tiempo compartido y robado casi veinte años después de la primera vez.

Patricia Figura, abril de 2012

Para uds, ya saben quienes son…y para cada pareja que se toma el tiempo, trabajo y placer de reconocer que el partido termina sólo cuando termina la vida.

2 comentarios:

  1. Bravo, Patri. Leerlo fue un verdadero recreo. Y tu comentario final, extra"el partido termina sólo cuando termina la vida" es una de mis ideas más arraigadas y a la que le pongo todas las fichas. Me "re" encantó.

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    1. gracias! fue escrito a pedido de una amiga... pero en realidad NO SE LO QUE PASÒ EN LA INTIMIDAD DE ESE DÌA JUNTOS jajajja sòlo me imaginè lo que me resultò grato.

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