¿SABÈS QUE ÈL TE ENGAÑA?

¿Sabes que él te engaña?...

Brillaban como plata recién pulida.

Eran atractivos, exitosos, compañeros y dos de las personas más solidarias que hubiese conocido.

Él era compañero de la primaria de ambas, en el secundario las dejó para ir a una escuela técnica, pero se seguían viendo en el club donde religiosamente iban a nadar tres veces por semana, después, dignos adolescentes de la época, alquilaban videos, paseaban por la peatonal donde estaba “todo el mundo”, formaban parte de un grupo de mas o menos doce entre chicas y chicos.

Cada uno siguió una carrera universitaria distinta, él ingeniería, ella, su amiga y novia del compañero en cuestión, docencia, y quien los miraba brillar optó por el profesorado de matemáticas.

Festejaban sus primeros diez años de casados, noviazgo largo pero fácil de llevar, personas alegres, muy celosas entre sí, amigos de los amigos, con ella y su marido formaban un buen cuarteto.

Si bien vivían lejos unos de otros, los fines de semana se reunían para un asado, mates en la playa, los horarios de natación ya nos les coincidían, pero cada uno intentó seguir con el deporte, era un tema común a los cuatro.

La fiesta era divertida, se conocían entre todos, salvo por algunos compañeros laborales, pero el clima era distendido.

Ella, con el corazón pesado por el secreto que guardaba, se sentía ajena al lugar, se sentía que les estaba fallando….pero a cuál de los dos en realidad?.

Cuando a ella se lo contaron, no lo podía creer, le pareció una locura y eso que era una persona con la mente abierta, pocas cosas la asombraban, se calló, no se lo dijo a su propio esposo, pero comenzó a estudiarlo un poco más a él…y a su amiga también.

Siempre de la mano, con uno de los mellizos a cocoyito y otro a upas de su mamá, recostados uno en brazos del otro en las sobremesas, esas caricias distraídas pero que no lo son tanto… él siempre fue más demostrativo que ella y no tenía ningún empacho en dejar claro sus apetitos sexuales… decía que su mujer lo excitaba como cuando recién comenzaron el largo noviazgo.

Una palmada en las nalgas al pasar, un pellizco y un beso rápido al gesto de ella de que no “se desubique” ya que a él le daba igual estar en la intimidad del hogar como con un grupo de personas.

Su propio matrimonio, bien avenido también, era más tranquilo, sin tantas demostraciones por parte de ninguno y con una sexualidad muy intensa, fuerte, demandante por parte de los dos.

En una reunión docente, esas que se dan en la sala de profesores, surgió una charla entre los que estaban en cambio de hora y llenando interminables formularios para el ministerio.

_Che, que onda tu amiga, la mamá de los mellizos de primer grado, con el marido… todo bien?_ la actitud chismosa le molestó y extrañó también porque justamente era una de las profes más tranqui y menos chusma la que le hizo la pregunta.

_Si…re bien, nos conocemos todos desde hace más de veinte años…. Por?_ le contestó muy al pasar, mientras ponía su sello a uno de los papeles membretados.

_Porque él es un asiduo visitante de la esquina de mi casa_ con la mirada le dio a entender a qué se refería… esquina oscura, con frondosos árboles habitados por colonias de murciélagos desde que tenía conciencia….sede de prostitutas también.

_Pero qué decís? De donde sacaste eso?...mira que va a ir con una prosti…para qué?_ estaba pálida, no lo creía y sin embargo….

_Qué se yo para qué? Le gustará un servicio rápido, la mujer no querrá hacerle “eso”… que se yo…una perversión, alguien las consume ¿no?... cada vez hay más y no es porque la gente espere al matrimonio para acostarse con su novio…. Hay tipos que se calientan mal con eso…. Son cinco minutos en el auto, en la oscuridad, nadie se entera, o eso creen… pagan dos mangos y llegan livianitos a la casa.

_No sé, no lo creo, te juro que ….no se, no, no, no puede ser…. Sabes lo que puede perder él si ella se entera? Adora a su mujer y a los chicos… mira que va a ir a arriesgar todo por diez minutos con una mina que no es nada para él_ estaba molesta, indignada.

_¿La patente es…..BBB 123? Es un fiat?.... nombrale mi dirección… qué se va a imaginar que mi ventanita, perdida en esa oscuridad,  lo va a delatar?

Ella tenía un nudo en el estómago, no solo que era la patente y el auto, sino que ¿porqué su compañera iba a inventar semejante barbaridad?...¿qué iba a hacer ella con eso?

_Ojalá no me lo hubieses dicho nunca…. Jamás…¿para qué me contaste algo tan horrible?, vos sabes que somos como hermanos, que nuestros hijos son casi de las dos familias, que yo los quiero muchísimo…¿qué crees que puedo hacer suponiendo que sea verdad?_

_Nada, que se yo, apretarlo a él!!!!! es tu amiga, ¿no?_

_¿Para qué? Para que busque otra esquina? La necesidad de hacerlo, la perversión, va a desaparecer porque yo lo amenace? ¿Cuál sería la ayuda?...decirle a ella que recoja su dignidad como pueda y que la familia que tuvo hasta hoy ya no la puede tener más salvo que comparta a su marido con una mujer paga? ¿Qué la culpa es de ella porque no se “esmera” en el sexo oral?_ en este punto estaba casi histérica, tenía nauseas y si hubiese podido le hubiera retorcido el cuello a su compañera de trabajo.

_Ssshhh, calmate, ni que fuera tu marido_

_Para el caso es casi lo mismo….si lo puedo creer de él lo puedo pensar de cualquiera…no se….¿vos lo viste a él o al auto? Se lo pudo dejar a alguien, a lo mejor lo estaban arreglando y se lo usaron… no sé…._ se tomó la cabeza con ambas manos, las puntadas eran fuertes… se sentía mal, estaban en un rincón alejado de las otras tres que al sonar el timbre del recreo se fueron.

_A lo mejor tu marido sabe… son amigos, hablan cosas entre ellos… preguntale, era èl, de eso no hay dudas… y te digo que tres veces por semana va seguro, cerca de las 21hs… y las chicas son siempre las mismas… ellas tienen sus esquinas y sus clientes, pero nunca se va con ellas…es todo ahí,_

El resto del día fue un infierno.

No lo habló con su esposo…ni con su amiga ni el marido de su amiga, estaba herida de guerra… sentía bloques de cemento en los pies…estaba descompuesta.

Arguyó una molestia estomacal, dio vueltas dos noches sin dormir.

Finalmente, antes de la fiesta de aniversario de sus amigos, fue a tomar el té de su mamá… por algún motivo prefirió hablar con ella, si bien era de otra generación, iba a saber cómo aconsejarla…le iba a alivianar el peso enorme que tenía en el alma.

Se mostró entristecida pero no asombrada…mucho menos escandalizada…”no digas nada nena, no te metas…. Al menos no por ahora… anda a saber qué está pasando por la cabeza de él….si a ella la ves bien, contenta, siempre arreglada, con proyectos, con su marido e hijos para todos lados…. ¿ qué le vas a decir? ¿Sabes que él te engaña?...¿cuál es el bien que le haces?...se va a armar un desastre, van a sufrir todos…después ella va a considerar bajo los juramentos de él que no, que no es real, que tu amiga vio mal, que el le prestó el auto al hermano… cualquier cosa le va a jurar pero la va a convencer … y vos los vas a perder a todos, porque hasta tu marido va a poner el grito en el cielo.”

“Ahora, si con el tiempo, a vos te consta lo que te contaron, y a tu amiga la ves sufriendo, mal, ajada, angustiada…. Entonces habla con él y ponele bien en  claro las cosas…no lo vas a encubrir mientras ella se marchita… pero ahora, espera y cerrà la boca, porque lo único que vas a hacer es daño.”.

Cuando soplaron las diez velitas ayudados por sus hijitos y con sus respectivos padres alrededor, todos aplaudieron y ella también….hubo besos y abrazos, lágrimas de emoción en los ojos de su amiga y los brazos de él la rodeaban tan fuerte y se mostraba tan orgulloso de su mujer… que por un momento llegó a convencerse que todo era un engaño, un mal entendido…tenía que haber una explicación lógica…¿pero cuál era?.

Con el tiempo lo sabría.

Y entonces trataría de ser lo más justa posible.

Patricia Figura, marzo de 2012