REINA
O ESCLAVA?
La pregunta le sonaba una y otra vez en su mente.
Fue
lo último que escuchó decir a su analista, fuera del consabido “lo dejamos acá”.
A veces odiaba esos “ejercicios de tarea”…. Pero tenía
que reconocer que a la larga era mejor plantearse las cosas.
Aunque estaba cansada.
Muy.
Eso
de atravesar los conflictos para salir del otro lado más fortalecida la estaba
agotando.
Cuando comenzó terapia, no era porque sintiera que
estuviera todo tan mal en su hogar, lo tomó como una crisis de la edad, donde
el debe era mayor que el haber si se tenía en cuenta lo planeado veinte años atrás.
Todo el folklore de la casa cómoda, amplia, las
vacaciones anuales, los hijos sanos, crecidos, las reuniones con amigos, los
fines de semana en familia, la seguridad de una economía fortalecida si establecía
algunas comparaciones, la debían tener más que en paz…feliz, plena, satisfecha.
Pero
hacía mucho que no se sentía así.
Mucho pesaba sobre sus hombros, un hogar difícil de
mantener, un marido que le brindaba todo tipo de comodidades, siempre y cuando él
considerara que eran merecidas, que valían la pena…si alguna inversión aunque
fuera de poca monta surgía de ella…entonces comenzaban las discusiones…”¿para qué?...¿te
parece que necesitamos eso? ….¿si así estás linda….con qué necesidad ese
tratamiento?...¿otro televisor?...¿otra vez vas a cambiar los sillones?
Nunca
elevaba la voz, todo con cobertura de azúcar.
Al principio, ella seguía los razonamientos de él y
le parecían válidos…hasta que tuvo que
comenzar a anestesiarse, a resignarse a dormir sus impulsos, a trocar sus
gustos por paz… entonces se desató la tormenta, comenzó a rebatir cada
argumento y se dio cuenta de que su postura era más que válida, que tenía razón
y le costaba ceder a cambio de no pelear.
Los tiras y aflojes la agotaban…quedaba extenuada,
solo quería dormir diez horas seguidas, que no la molesten… pero si se recluía,
surgía un nuevo motivo de discusión: “llego de trabajar y no hay nada para
comer”, “¿ya estás acostada…qué suerte, yo estoy levantado desde las siete de
la mañana?”, “¿podes llevar el gato al veterinario….ya que no tenès nada que
hacer?”.
Por supuesto que daban todos por sentado que las
toallas se lavaban, secaban y perfumaban solas, aparecían limpias como por arte
de magia, que los chicos abrían los ojos en el colegio, sin que nadie los
despierte, prepare el desayuno de todos, compre absolutamente cada fruta,
verdura, carne o dulce que apareciera sobre la mesa, la ropa usada con un toque
de varita quedaba colgada en la percha planchada e impecable, que los pisos se mantenían
limpios gracias a la chica que iba dos veces por semana, el coche siempre con
combustible y su seguro pago, las órdenes de consulta de los médicos de todos
volaban de la boca de expendio hasta el escritorio sin que ella hiciera colas
interminables…. Y así la lista seguiría hasta el infinito.
Pero
mi amor!!!! ¿no es lo que hacen todas las mujeres?, las que tienen la suerte de
tener una familia y un marido que las mantenga??????....¿sabès los problemas que tengo yo en mi trabajo?, vos
porque estàs acá, tranquila, tenès aire en el verano, calefacción en el
invierno, vacaciones, auto en la puerta, una obra social que te cubre todo….mira si tuvieras que ir a las cuatro de
la mañana a anotarte al hospital? ¿pensàs que con tu sueldito podrías mantener
todo esto?, si estuvieras sola estarías llena de cuentas por todos
lados!!!!.... lo único que intento es que todos estemos bien, cuidarnos para
estar tranquilos manteniendo todo lo que hice… o que me ayudaste a hacer….no se puede razonar cuando te ponès
asì!!!!! Desde que empezaste a ir de ese psicólogo parece que te hubieran
lavado el cerebro, no sos vos….NO SOS
VOS.
Sos la REINA de esta casa, sin vos no tiene sentido
nada, ni mi esfuerzo, mi sacrificio, mi trabajo, mi vida….mis hijos te
necesitan y yo también, me muero sin vos.
Ella durante todo ese discurso absurdo pero que él creía
una apología del amor en pareja lo miraba con ojos vidriosos, pero no de lágrimas,
de enajenamiento…su coraza había comenzado a cubrirla, las balas comenzaban a
rebotar, la ira que antes la ganaba en estas discusiones, estaba casi bajo
control…¿reina o esclava? Muchas veces pensó en que las bandas de oro que él le
regalaba en cada aniversario tenían un nombre perfecto “esclavas”, de hecho,
ese era su origen.
De a poco se estaba soltando.
Él se daba cuenta y eso lo enloquecía, no sabía cómo
retroceder, cómo volver a tener en su hogar a esa esposa que terminaba
claudicando de sus “arranques” por el bien de todos.
“¿Qué
es lo que te falta?...le preguntó la noche anterior cuando ella prefirió irse a
dormir a km de distancia antes que acceder una vez más a tener sexo con él.
“Alegría
y libertad” fue lo
primero que le brotó a ella de sus labios tristes.
“Estàs loca??? De qué te quejas??....deberías ver lo
que es estar sola, en la jungla, allá afuera….vamos a ver si tenès vacaciones
todos los años, peluquería cada vez que se te antoje, veinte pares de zapatos,
tres placares de ropa que ni siquiera usas, coche, casa de fin de semana, el champancito
helado, y dos heladeras repletas de todo lo que les gusta a mis hijos y a vos”.
En ese momento se imaginó sola, en un departamento
chico, pero de ella, con un balcón con plantas y flores para regar cuando
tuviese ganas, con un sillón cómodo para ver películas a la hora que quisiera,
o simplemente tirarse a charlar con amigas durante horas sin tener “culpa” de
no estar haciendo “nada útil”…se vio escuchando música tranquila mientras leía
un libro a media tarde, sin inquietarse por “si la encuentra al divino botón”….una
madrugada de charla y mates con quien quisiera….respirar tranquila, sin dar
explicaciones, sin estar inquieta sin tener que justificar cada paso.
Y supo la respuesta que tenía para su analista…. Pero
sobre todo para ella misma.
Atravesar
el conflicto y salir del otro lado, no solo más fuerte sino más feliz.
Patricia Figura, enero de 2014
Patricia, es la diyuntiva de muchas mujeres, yo elegi la libertad y crie sola a mis hijos y esto feliz porque lo logre. Pero muchas 'independientes' pasan la vida tristes y esclavas de su depresion, que la felicidad esta en uno, no en la pareja o la no pareja, cada quien sabe a que atenerse, yo no aguante que me controloran pero mi madre no supo vivir sin su hombre al lado y lo consideraba 'su mision' Asi que cuando murio mi padre se caso con otro a los 3 anios y se sintio feliz asi... no todos somos iguales. Yo sigo sola y feliz, mi hija no se ve sola, dice que ni pensarlo... ya ves... pero me gusta como lo planteas, es cierto que cuando hay diferencia de puntos de vista la cuestion no funciona... ser una prostituta con libreta paso de moda hace decadas...
ResponderEliminartal cual, la prostituciòn marital es algo que en mi cabeza no me entra, pero por otro lado, tampoco enbandero la no pareja, puesto que para mì la familia y el par son muy importantes, en este cuento me parece que lo que terminò resultando es que no eran pares sino un sometimiento hacia quien debìa ser su compañera y mucha presiòn en aras de sostener "lo logrado". besos Moni, mil gracias
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