Sharbat Gula , nacida en 1972, es una mujer afgana de la etnia pashtun quien se vio obligada a huir de Afganistán rumbo a Pakistán hacia un campo de refugiados donde fue fotografiada por un fotógrafo de la National Geographic llamado Steve McCurry. La imagen se hizo famosa cuando fue publicada en la portada de la edición de junio de 1985 de la revista.
Sharbat Gula fue fotografiada cuando tenía 12 años por el fotógrafo Steve McCurry, en junio de 1984. Fue en el campamento de refugiados Nasir Bagh de Pakistán durante la guerra contra la invasión soviética. Su foto fue publicada en la portada de National Geographic en junio de 1985 y, debido a su expresivo rostro de ojos verdes, la portada se convirtió en una de las más famosas de la revista.
Portada original de National Geographic Junio 1985
El mismo hombre que la fotografió, Steve McCurry realizó una búsqueda de la joven que duró 17 años. El fotógrafo realizó numerosos viajes a la zona hasta que, en enero de 2002, encontró a la niña convertida en una mujer de 30 años y pudo saber su nombre. Sharbat Gula vive en una aldea remota de Afganistán, es una mujer tradicional pastún, casada y madre de tres hijos más un cuarto que murió cuando era pequeño. Su marido, con quién se casó poco después de su famosa fotografía, se llama Rahmat Gul y sus tres hijos Robina, Zahida, y Alia. Ella volvió a Afganistán en 1992. Nadie la había vuelto a fotografiar hasta que se reencontró con McCurry y no sabía que su cara se había hecho famosa. La identidad de la mujer fue confirmada al 99,9% mediante una tecnología de reconocimiento facial del FBI y la comparación de los iris de ambas fotografías. Su historia fue contada en la edición de marzo de 2003 de la revista y en un documental para televisión titulado Niña desaparecida: misterio resuelto. La sociedad que publica la revista creó en su honor un fondo especial de ayuda al desarrollo y creación de oportunidades educativas para las niñas y mujeres afganas.
EXTRAÌDO DE WILKIPEDIA.
domingo, 27 de mayo de 2012
martes, 22 de mayo de 2012
¿Vientos de Cambios?
¿Vientos
de Cambios?
Algún tipo de anestesia general la mantenía aletargada,
dormida, paralizada.
El hecho de mirar alrededor y no verse reflejada en ningún
parámetro “oficial” por momentos la alteraba, la hacía buscar justificaciones,
comparaciones tipo DEBE Y HABER, esas
que no sirven en la vida real, que no posibilita respuestas de antemano… sin
llegar al final imposible saber el SALDO.
Lo que se elige a los veinte no es lo mismo que a
los treinta, los cuarenta o los cincuenta…ni qué hablar después.
Se
lo repetía mil veces.
No
lo entendía.
La vida es útil solamente si se tiene un trabajo
remunerado?
Un trabajo muy bien remunerado…. Sino cubre las
necesidades propias y familiares…¿sirve realmente?.
Hacerlo solamente por egoísta ambición…¿es válido?
No
existen falencias siempre?
Se
tome el camino que se tome…¿no se pierde invariablemente lo que queda del otro
lado?.
Vuelta al principio.
Imposible saber si el saldo es positivo.
Se supone que lo importante es el transcurso, el tránsito,
vivir de acuerdo a las creencias de cada uno.
Qué hacer con el desgano?.
Qué hacer con los “no quiero”?.
Qué
hacer con los límites ajenos que afectan las decisiones propias?.
Cuando esos planteos lograban germinar en su mente
atribulada, lejos de provocarle una ansiedad que la movilice a buscar
respuestas… la apabullaban, la agotaban, redoblaba las horas de sueño…la
incapacitaban para llevar adelante cualquier tipo de responsabilidad.
Su
mente se iba.
Buscaba
respiros imaginarios.
Desvariaba.
Después una noticia, una canción, una imagen, una
palabra…. Cualquier bendición inesperada… la sacudía, le daba la dosis de
adrenalina que le faltaba a su cuerpo adormecido y volvía a pisar fuerte, a reír
a carcajadas, a ser el alma de una reunión, a cambiar el color de cabello, a
pasear con su familia, con amigos, a
cubrir las necesidades afectivas de todos, a ser la incondicional, pilar y
soporte del techo que pendía sobre tantas almas.
Los párpados ya no le pesaban.
Las piernas volaban ligeras de un lado al otro.
Los problemas, fuentes de agobio y opresión, se
solucionaban, a veces no de la manera esperada o deseada, sino de la posible…
pero se avanzaba.
El
sol invadía su entorno.
Los
árboles volvían a reverdecer…y no había mejor orquesta que la de sus visitantes
alados al frondoso naranjero del fondo.
Vientos de cambios.
Proyectos prometedores.
Armonía familiar.
Tranquilidad personal.
Alegría.
Claro, que no debía ser ilusa.
Nada se mantenía estático ni en un estado ni en el
otro.
Seguramente la zozobra y la inseguridad le harían burla
en cualquier momento y desde el rincón menos esperado.
Pero no ahora.
Sacudió las sábanas blancas.
Las agitó y partículas microscópicas volaron a través
de los rayos que entraban a raudales por la aireada habitación.
Se
encaminó a su amplio baño antiguo y tomó una ducha caliente y paradójicamente refrescante.
Eligió
un vestido liviano, de algodón que acariciaba su suave piel bronceada.
Tenía el itinerario armado de los pendientes que debía
solucionar.
Nada era propio.
O sí.
Depende el cristal con que se mire.
Aprovechó para hacer todo mientras estaba fresco, después
del mediodía el calor sería sofocante.
Su
vida estaba nuevamente en marcha.
Los
demonios debidamente encerrados hasta la próxima tormenta interna.
Patricia Figura, mayo de 2012
domingo, 20 de mayo de 2012
NO ME ANALICES...
NO ME
ANALICES….
_La voluntad ajena me mata, me cansa, me fastidia_
deslizaba la cucharita sobre el helado cremoso, fresco y gigantesco… lo saboreaba
despacio, con placer.
_Interesante,… y porqué ?...quiero decir, qué es lo
que te molesta?... que logren lo que vos no podès?_ él obviaba el utensilio, lo
disfrutaba directamente con su lengua, lo giraba para que no le chorreara los
dedos… claro que eso no le impedía observar el ritual de ella con atención.
Ella sin mirarlo, sino totalmente concentrada en su
cucurucho, le respondió como al pasar:_ No, no necesariamente, me fastidia que se priven de cosas que
les gusta en aras de otra mucho menos trascendente y que en realidad es un
condicionamiento social más que una necesidad propia. _ Como él no le
respondiera, dejó pasar un momento y continuó _Por ejemplo, ¿te das una idea de
la cantidad de personas que estarían felices de disfrutar esto?_ señaló su exquisitez_
y no lo hacen…pasan a mil km de una heladería, se atrofian los sentidos para no mirar, oler o degustar todo lo que
puede ser una tentación y un atentado a la
silueta… comen sólo por nutrición y no por placer_
_A ha… si, son elecciones… o cerràs boca y mente al
sabor y tenès un físico delgado, según vos, o
tenès la heladera repleta de cosas ricas, sabrosas, y que engordan… es así,
salvo quienes tienen una genética privilegiada, es así…. Lo que no entiendo es cuál
es el problema del libre albedrio_ con una sonrisa la miraba de reojo… no era
una mujer con varios kilos de más, tampoco era la escultura de cuando la
conociera cinco años atrás… su atractivo tampoco residía pura y exclusivamente
en su apariencia, tenía algo, era muy seductora, verborràgica, divertida… y lo
que se pusiera lo llevaba con un cierto estilo… provocaba, aún sin proponérselo…la
gente se volvía a mirarla…sonrisa pronta, mirada inteligente… pero se notaba
que algo le molestaba….
_No me enojan las elecciones ajenas, me molesta que
se auto impongan un sacrificio inútil…es un oprobio….luchar para bajar un kilo,
dos, tres,…. Para qué? Invariablemente lo
van a volver a subir_ mantuvo la cucharita en la boca mientras pensaba en lo
que quería decir_ Es como el quijote contra los molinos de viento…son batallas
perdidas de antemano, no son reales…el privarte de algo que podès tener y
disfrutar no es normal, es patológico….cómo puede ser que pasen hambre durante
años… cierren la boca, miren para otro lado para que el jeans sea dos números menos?
Para que la bikini quede a los treinta igual que a los dieciséis?.... no, es una voluntad desperdiciada
en un proyecto inútil_ le clavó los ojos esperando su aprobación.
Recostado en el
silloncito de la heladería del barrio donde vivían, él seguía disfrutando
su chocolate con almendras y nueces con aparente indiferencia a la perorata de
ella.
Al darse cuenta de que no obtenía ningún comentario,
insistió con un _ ¿Y?...podès darme tu opinión…lo único que hacès es pasarle la
lengua al helado_ le reconocía el tono molesto, el enojo no tal velado… la
piedra en el zapato.
_Mi amor…_ le contestó con voz melosa, _ si querès
volvemos a casa ya y te muestro algo mejor para hacer con mi len.._ ella lo pellizcó
mientras se reía, siempre conseguía hacerla reir… pero a ella le interesaba su opinión.
_Te estoy hablando en serio!! Pidiendo una opinión!...me
fastidia que salgas por la tangente o me contestes una estupidez_ mordisqueaba
el cucurucho a medida que el helado iba desapareciendo…_ Si quiero entablar una
conversación, por lo menos prestame atención….PENSÀ_
El suspiró…con una sonrisa dibujada en los labios.
_Hace un par de horas en la cama no te quejabas de
mi…_ se interrumpió divertido al ver la mirada de advertencia de ella, si bien
le causaba gracia, no quería hacerla enojar, sus chinches tendían a durar muchísimo
y él pretendía terminar el domingo de una manera muy distinta…cena rápida y
mucho sexo… nunca se cansaba de ella, lo excitaba… el solo verla caminar,
realizar cualquier tarea común y corriente como cambiar de canal con el
control, tomar un CD para tirarse a escuchar música, revolear los tacos cuando llegaba cansada de
una salida o pararse desafiante mientras señalaba un toallón mojado dejado por él
sobre el acolchado … todo lo provocaba, le encantaba.
_Qué querès que te diga nena?...sinceramente? todo
este discurso sobre voluntades que no son las propias, la privación ajena a los
placeres tan terrenales como la gula, la glotonería…mientras te chupàs los dedos
con un helado gigante de diez mil calorías y
después de preparar una bolsa de
consorcio entera con ropa que ya “seguro no vas a usar”…¿querès que te
interprete?_ los ojos le bailaban con palabras no pronunciadas.
_No me
analices…hace años que no tenès derecho a eso…mi terapia se cortó porque
los dos decidimos cambiar el diván por la cama_ la miraba sin pestañear, atento
a lo que tenía para decirle…_ A veces extraño esa época_ continuó ella con la
mirada perdida en un punto fijo_…tirarme en tu consultorio y hablar sin medir
las palabras ni sus consecuencias… desnudarme, entregarme._
_Creí que de
distinta manera es lo que hacías ahora….te sentí entregada…sin tapujos, y en cuanto a la
desnudez…nada que agregar al respecto_ por otro lado no te estoy analizando… ya
no está en mí aunque quisiera…y no quiero en absoluto…. Pero no es casual tu “preocupación”
por el encauce acertado o no de las “voluntades ajenas”… muchas personas eligen
cuidarse por estética y es válido mientras lo hagan desde la salud, todos
tenemos distintas motivaciones, si una persona se siente mejor con la imagen que
le devuelve el espejo cuando pierde unos kilos, todo bien, pero hay otras,
muchas, más de las que crees, en que el tema pasa absolutamente por la salud,
no les queda otra y no hay opción posible, tal vez se cambiarían mil veces por
vos que podès disfrutar de mil sabores y lo solucionas cambiando o agregando
talles muy de vez en cuando_ la miraba mientras se mordía apenas el costado de
la boca…estaba inquieta, aún en su enamoramiento podía no ser tan ciego como
para reconocer sus debilidades.
_En esos últimos casos no serían voluntades
quijotescas… la vida está en juego, hay
un motivo válido_ se limpió las manos con las casi inútiles servilletitas de
papel_ y sí me analizas… no te das cuenta, pero muchas veces lo hacès.
Él
la miró en silencio…cuando ella se removió un poco en su asiento, demostrando
cierta impaciencia, sin dejar de mirarla fijamente, habló.
_TODOS los motivos son válidos amor, mientras las
cosas no se desmadren ni se pierda de vista el objetivo primordial de estar en equilibrio,
el empuje de cada uno es merecedor de respeto, aunque moleste a los que no
tengan espíritu de sacrificio, por llamarlo de alguna manera_ y abriendo las
manos en un gesto de “quiero dejar esto claro” agregó _ y te aseguro de que no te analizo…me volvería
loco, no podría interpretarte de otra manera que como par, como compañero…¿es
una fantasía para vos? ¿Te imaginàs que te psicoanalizo?... te haces la cabeza
con eso? -_ la manera en que la miraba, el saberlo excitado la provocaba, le hacía
aletear el estómago como cuando sabía que en momentos nada más él estaría adentro
suyo.
No respondió… a menudo cuando se sentía avergonzada
no respondía, se quedaba callada, incapaz de echar mano a la palabra que tan fácilmente
acudía a ella.
_Te
estoy preguntando… te calienta pensar en mí como cuando era tu analista?_
La
idea no lo molestaba, sabía demasiado bien que lo de ellos no había sido una
pura cuestión de transferencia…se enamoraron, jamás le había pasado con otra
paciente…ella venía de una ruptura matrimonial que lejos de agobiarla la
liberaba.
_Puede ser…no, no es exactamente así…. Por nada del
mundo querría que vuelvas a ser mi analista y que lo nuestro se termine, aunque
sería imposible volver a terapia juntos es obvio, pero me seduce recordar cómo
fue, cómo empezó todo… la cabeza que me hacía con vos, todo lo que me imaginaba
sexualmente…cuando me hablaste, me dijiste que me ibas a derivar y el porqué… no sé, creo que fue lo más erótico que me
pasó en la vida…incluso lo que me costó hacerte entender que “técnicamente”
ya no eras mi analista…._ le extendió la mano que él tomó y pasó alrededor
de su hombro para abrazarla mientras
comenzaban a caminar_ Es algo que me da cierta morbosidad pensar.
No podía borrar
la sonrisa que le bailaba en la cara… algo se le acababa de ocurrir.
_A dónde vamos?_ preguntó ella_ la casa queda para
el otro lado.
_ Me acordé que tenía que pasar a buscar una carpeta
por el consultorio_ le hizo un guiño mientras ella lo miraba con los ojos
agrandados por la sorpresa_ me acompañàs?.
Se mordió el labio inferior y acomodándose mejor en
el asiento del coche, anticipándose al placer que llegaría solo le respondió_
vamos._ el tema de las voluntades o la propia falta de ellas, quedaría para
otro momento.
Patricia Figura, mayo de 2012
miércoles, 16 de mayo de 2012
LA DECISIÒN... ( final de "no te podès equivocar")
La Decisión. (final de “no te podès equivocar”)
Tres
años atrás su vida estaba en una
encrucijada.
El anhelo profundo de ser madre, el reloj biológico que
no jugaba demasiado en su favor y su pareja que no la satisfacía en muchos
aspectos.
En su callejón casi sin salida, comentó la diatriba
con su amiga, alocada, madraza, excesivamente sincera, alegre, sin mochilas
prejuiciosas a cuestas.
Café de por medio le aconsejó que no se privara de
ser mamá, el tiempo no corría, volaba, pero que no lo tuviera con su novio, no
la notaba feliz ni enamorada, al contrario, era como un acostumbramiento,
respeto a la buena persona y paliativo de una soledad que en realidad no la
molestaba.
Después
de escandalizarse, y rebatirle la loca idea de buscar un semental sólo para
embarazarse sin que nadie reclamara derechos sobre su bebé, comenzó a pensarlo,
a darle vueltas al asunto.
La idea era descabellada.
No tenía ánimo de hacerle semejante trastada a su
pareja.
Su
pareja no era un par realmente, aunque era consciente de que la que boicoteaba
permanentemente la relación era ella misma.
Su amiga medio en broma y medio en serio, le iba
marcando posibles “candidatos”, fue desde los cadetes de la oficina hasta los
inversionistas que saludaban con un cortés “buenos días”…. lograba hacerla reír,
opinar sobre el desempeño de cada uno en las artes amatorias, ponerse colorada
y finalmente… tomar la decisión.
Habló con su ¿compañero?... le pidió tiempo, saber
si iba a extrañarlo, a necesitarlo de alguna manera en lo afectivo, si las
cosas que tanto la molestaban, en su ausencia se irían minimizando…él se sintió
mal, la quería de verdad, pero también formar una familia, no ser una especie
de marido itinerante, quería llegar a casa, tener un hogar.
Se volvió un poco más reconcentrada, “maniática” era
la palabra que usaba su amiga, no tenía grandes grupos de solteras como para
salir a conocer gente nueva, su rutina no incluía boliches de solos y solas, la casada le hizo un perfil para un sitio
web donde podía conocer toda una serie de hombres que seguramente estarían encantados
de hacerle una visita…. Y un hijo.
Se escandalizó, se enojó, y entró… de alguna manera
se las arregló para que después del segundo o tercer encuentro virtual, los
muchachos en cuestión, rumbearan para otro lado, no se desanimó y continuó la búsqueda.
Cuando un lunes llegó a la oficina, y acercándose muy
sigilosamente a su amiga con aire conspirativo y voz siseante le contó que se
iba a encontrar con uno de los del chat, la otra explotó en un grito de alegría,
la abrazó y bailó con ella alrededor del escritorio.
Era una mujer atractiva, no había huellas en su
cuerpo de bebés o de una vida dedicada a otros, buena pilcha, buena charla,
pero no era de las que provocaban una reacción física inmediata en el sexo
opuesto, no aceleraba el pulso masculino, el atractivo de ella residía en el
trato, en la conversación.
El encuentro pasó sin pena ni gloria, se aburrieron
mutuamente.
Al poco tiempo quedó con otro, cuando llegó se dio
cuenta de que era bastante menor de lo que le había dicho, se quedó y charlaron
un rato, se divirtió, el chico la hacía
acordar a su amiga, verborràgico y simpático, no estaba acostumbrada al escarceo seductor y se ve que el pibe en cuestión
tenía un entrenamiento bárbaro.
Se descubrió con ganas de volver a verlo, abrió la página
varias veces hasta que lo encontró conectado, trató de buscar temas en común (
eran escasos, pero lo intentó), para su sorpresa él sabía mucho de cine, no
solo del actual sino de su época de oro, ella sostenía que jamás le hacían honor
a los libros por buena que fuera la peli, el tema evidentemente a él le
apasionaba, cuando se dio cuenta eran
las dos de la madrugada y esa fue su primera llegada tarde a la oficina en
años.
Pocas noches después, con la página abierta por si él
entraba, mientras contestaba unos mails laborales, dio un respingo al ver su ventanita
y que le hablaba, estaba por ir a una premier de cine no convencional y la
invitaba, en una hora y media.
Titubeó sólo un instante, se cambió cuatro veces de
ropa hasta lograr una combinación menos rígida, más informal y fresca, su
cabello brillante y con la bendición de no necesitar nada para el friss era su
mejor rasgo, se miró por última vez al espejo y salió entusiasmada como pocas
veces en su aburrida y estructurada vida.
La pasó genial, se rió mucho, hizo comentarios
acertados y se asombró de lo versado que era él en el tema.
Le presentó a conocidos suyos, lo de las películas no
era un hobbie solamente, formaba parte de un proyecto de cortos independientes…
viajaba muchísimo, se autofinanciaba desde hacía años, pero también tenía buenos
ingresos cuidadosamente invertidos lo cual parecía extraño porque su aspecto
era increíblemente joven.
Se ofreció a acompañarla, ella se mordió la lengua
antes de rechazar y optar por un taxi, caminaron, entraron en un café de esos
que están abiertos hasta altas horas…. Se perdieron en una discusión sobre el
cine comercial y el underground… ella fue a trabajar con ojeras, sin dormir y
con una sonrisa preciosa.
La amiga declaró casi un feriado en el trabajo… quiso
detalles, hizo una mueca cuando la otra con cara de éxtasis le contó de las
charlas interminables.
_Pero sexualmente? Te gusta? Encontraste al padre de
tu hijo?-
_Mirà lo que me preguntàs!!! Te aseguro que lo que
menos pienso ahora es en el tema del bebé…estoy asombrada, hace años que no
disfrutaba de la compañía de un tipo como ahora….las horas pasan volando, me
gusta cómo me mira, las cosas con doble sentido que deja escapar…. Pero sobre
todo la pasión que pone para cumplir sus metas…se atrevió a vivir de lo que le
gusta…¿no te parece increíble?_
Estaban escritorio de por medio, los jefes de viaje
y la gente de atención al público ajenas a ellas completamente.
_Lo que me parece felizmente increíble es verte
asì!!!!!!.... me encanta! Te brillan los ojos! Llegàs tarde, no dormís! Me encanta,
me encanta!_ se rieron juntas.
Poco tiempo después, un fin de semana soleado, después
de pasear por una feria de artesanos internacionales, él la invitó a su casa,
un poco destartalada, con antiguos pisos crujientes y un patio central con plantas muy al estilo
de las abuelas de antes, le iba a enseñar algo de su trabajo, ella estaba expectante
y admirada, no se reconocía a sí misma, sentía que por primera vez en su vida
estaba siendo “ella”.
Hicieron el amor…fue natural, casi como un paso más
de toda la danza del ir conociéndose, supuso que era un hombre apasionado, pero
no imaginó que tanto, se asombró de su propia urgencia… su necesidad una y otra
vez de él, jamás había sido sexualmente muy activa, ahora se reconocía ávida en
ese aspecto…la fue conquistando paso a paso…. Sin presión ni planteos, sin
invadir, pero siempre presente…le contagiaba su entusiasmo y ella se volvió más
divertida, ingeniosa… más feliz.
Dormían abrazados, a cualquier hora, lo extrañaba muchísimo
cuando viajaba a filmar, disfrutaba de su regreso, alguna vez lo acompañaba,
otras seguía con sus costumbres.
Dejó de pensar en la maternidad.
Lo conversaron con él….no era algo que se pudiera
dejar para mucho más adelante por parte de ella, estaban bien, se disfrutaban.
Y como todo con ellos, se dio de manera natural, sin
planificar ni obsesionarse, un año atrás el test de embarazo dio positivo, y
ella lloró, como nunca, si siquiera cuando era chica, mezcla de emoción, miedo,
inseguridad… no quería que nada alterara la alegría que sentía con él… tan
hombre siendo tan joven….la tranquilizó, la amó más aún… la filmó y cuidó…formaron
una familia, no muy convencional, nada estructurada… feliz….
_Viste, todo se dio de tal manera como si realmente
fuera escrito por un guionista?_ le dijo su amiga mientras sentadas al sol
disfrutaban de ver los chicos jugando en la plaza y al bebè durmiendo plácidamente
en su cochecito.
_Al final no estabas tan loca…jamàs pensé que podría
abrir mis manos de tal manera como para soltar mi vida anterior y tomar este
sueño_
_Obvio que no estoy loca!...vos estabas entumecida…ya
sabes… cuando entrés en alguna otra encrucijada … acá estoy! Firme para
patearte el tablero.
A veces… escuchando los gritos internos, se puede
llegar a ser muy pero muy feliz.
Patricia Figura, mayo de 2012
sábado, 5 de mayo de 2012
LOS EMERGENTES...
Los Emergentes...
Hoy conversando con mi hija más chica, recordé mi época de maestra jardinera.
Dando vueltas por la casa, mientras yo me dedicaba a limpiar los vidrios y preparar el almuerzo sabatino, ella descubrió una cajita de cuero negro, estaba dentro del cajón donde guardamos los elementos de escritorio.
Me la mostró y me comentó que le "habían dado ganas" de jugar a la doctora.
El simple talonario unido por uno de sus extremos con pegamento, que se encontraba dentro de la caja, le recordó el recetario de su médico, de ahí en más desarrolló toda una dramatizaciòn.
Ella no es muy dada a las muñecas, o los típicos juegos de roles infantiles, le encanta leer cuentos, escribir canciones, pintar adornos en madera, dibujar y hacer millones de pulseras con piedras de colores, si es en compañía de amigas, mejor, sobre todo para los juegos de mesa.
Asì que siguiendo la conversación, fui tirando ideas que ella fue descartando, tomando, modificando... armó un consultorio, buscó muñecas casi olvidadas, las adecentó, desenterró del fondo del cajón de los juguetes la valijita de "Juliana Veterinaria", que para el caso servía igual y armada de todos esos tesoros, más algún sello de Winie The Pooth , fue al patio de adelante y organizó su consulta.
Al poco rato, mientras yo enjuagaba por enésima vez los vidrios de la ventana que daban a ese lugar, la escuchaba recetar, "ibuprofeno", "paratropina" y reliveràn... hubo internados, anotaba las habitaciones con las indicaciones para la enfermera ( para que no se confundan de paciente.... será una pavada pero me pareció muy acertado de su parte).
Invariablemente, viajé en el tiempo, cuando incentivaba a mis nenes disfrazada de muñeca de goma, y trabajábamos las partes del cuerpo humano, preparaba el ambiente para que nos visite el duende de los colores y asì conocieron los primarios disfrutando de mil actividades, jamas utilicé "la palabra" y nada más, los emergentes estaban a flor de piel y ellos se desesperaban por descubrir mil mundos distintos acompañados de mi alegría, emoción y fantasía, rodeada de un millón de contenidos que se aprendían jugando.
Fue hace mucho, hace años que no ejerzo, seguramente hoy en algunos aspectos las cosas son diferentes, los chicos ya no se asombran tan rápido, o no les causa sorpresa una caja, misteriosamente abandonada en la salita, mientras ellos jugaban en el recreo, ahora todo es más ciber, más ruidoso.... pero es normal que las cosas cambien.
Nosotros también cambiamos, de rumbos, de incentivos, de relaciones interpersonales, de proyectos, de miedos....lo importante es escucharse y no engañarse, tal vez lo que fue bueno para uno en una época, no lo sea en otra....hay que avanzar y prestar atención a lo que el corazón dicta cuando late más fuerte, porque no hay peor lamento que llegar al final con la lista de cuentas pendientes, más extensa que la de metas cumplidas.
Hoy disfruté de un viaje al pasado, mientras me sabía satisfecha de mi vida actual, mi hogar, mi amor y mis hijas.... los vidrios no quedaron impecables.... tampoco me importó demasiado, pero ver a mi nena desplegar toda su imaginación a partir de una simple cajita de cuero....me dibujó una sonrisa gigante.que aún conservo.
Patricia Figura, mayo de 2012.
Hoy conversando con mi hija más chica, recordé mi época de maestra jardinera.
Dando vueltas por la casa, mientras yo me dedicaba a limpiar los vidrios y preparar el almuerzo sabatino, ella descubrió una cajita de cuero negro, estaba dentro del cajón donde guardamos los elementos de escritorio.
Me la mostró y me comentó que le "habían dado ganas" de jugar a la doctora.
El simple talonario unido por uno de sus extremos con pegamento, que se encontraba dentro de la caja, le recordó el recetario de su médico, de ahí en más desarrolló toda una dramatizaciòn.
Ella no es muy dada a las muñecas, o los típicos juegos de roles infantiles, le encanta leer cuentos, escribir canciones, pintar adornos en madera, dibujar y hacer millones de pulseras con piedras de colores, si es en compañía de amigas, mejor, sobre todo para los juegos de mesa.
Asì que siguiendo la conversación, fui tirando ideas que ella fue descartando, tomando, modificando... armó un consultorio, buscó muñecas casi olvidadas, las adecentó, desenterró del fondo del cajón de los juguetes la valijita de "Juliana Veterinaria", que para el caso servía igual y armada de todos esos tesoros, más algún sello de Winie The Pooth , fue al patio de adelante y organizó su consulta.
Al poco rato, mientras yo enjuagaba por enésima vez los vidrios de la ventana que daban a ese lugar, la escuchaba recetar, "ibuprofeno", "paratropina" y reliveràn... hubo internados, anotaba las habitaciones con las indicaciones para la enfermera ( para que no se confundan de paciente.... será una pavada pero me pareció muy acertado de su parte).
Invariablemente, viajé en el tiempo, cuando incentivaba a mis nenes disfrazada de muñeca de goma, y trabajábamos las partes del cuerpo humano, preparaba el ambiente para que nos visite el duende de los colores y asì conocieron los primarios disfrutando de mil actividades, jamas utilicé "la palabra" y nada más, los emergentes estaban a flor de piel y ellos se desesperaban por descubrir mil mundos distintos acompañados de mi alegría, emoción y fantasía, rodeada de un millón de contenidos que se aprendían jugando.
Fue hace mucho, hace años que no ejerzo, seguramente hoy en algunos aspectos las cosas son diferentes, los chicos ya no se asombran tan rápido, o no les causa sorpresa una caja, misteriosamente abandonada en la salita, mientras ellos jugaban en el recreo, ahora todo es más ciber, más ruidoso.... pero es normal que las cosas cambien.
Nosotros también cambiamos, de rumbos, de incentivos, de relaciones interpersonales, de proyectos, de miedos....lo importante es escucharse y no engañarse, tal vez lo que fue bueno para uno en una época, no lo sea en otra....hay que avanzar y prestar atención a lo que el corazón dicta cuando late más fuerte, porque no hay peor lamento que llegar al final con la lista de cuentas pendientes, más extensa que la de metas cumplidas.
Hoy disfruté de un viaje al pasado, mientras me sabía satisfecha de mi vida actual, mi hogar, mi amor y mis hijas.... los vidrios no quedaron impecables.... tampoco me importó demasiado, pero ver a mi nena desplegar toda su imaginación a partir de una simple cajita de cuero....me dibujó una sonrisa gigante.que aún conservo.
Patricia Figura, mayo de 2012.
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